Acapulco, México AFP La sospecha de que los cuerpos hallados en una fosa común cerca al balneario mexicano de Acapulco correspondían a un grupo de turistas secuestrados pareció confirmarse entre el viernes y ayer, tras el anuncio de la fiscalía de que los 18 fueron identificados por sus familiares.
“Los 18 cadáveres de la fosa clandestina fueron identificados”, informó David Sotelo, procurador (fiscal) del estado de Guerrero.
Familiares de los turistas, todos del vecino estado de Michoacán, ayudaron con la identificación. Según la fiscalía de ese estado, ninguno de los vacacionistas tiene antecedentes judiciales.
Solo dos personas del grupo de 22 evitaron la captura y alertaron a la policía. Aún se desconoce el paradero de las otras dos personas raptadas en el mismo suceso.
La fosa se descubrió el martes tras una llamada anónima que alertó a la policía sobre la presencia de dos cadáveres en las afueras del puerto del Pacífico. Sobre uno de los cuerpos, los uniformados encontraron un mensaje que advertía sobre una tumba clandestina en las inmediaciones.