Fracasa otra vez reunión sobre la deuda griega

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Atenas. EFE y AFP. La crucial reunión del primer ministro griego, Lucas Papademos, con los líderes de los partidos políticos helenos para decidir su respuesta a las exigencias de los acreedores del país, concluyó ayer, tras ocho horas de negociaciones sin que haya habido consenso.

Los tres partidos participantes en el encuentro están de acuerdo sobre “todos los puntos, menos en uno”, según un comunicado de los servicios del primer ministro, que espera cerrar el acuerdo en la noche de hoy.

El punto de divergencia reside en “la reducción de las jubilaciones”, precisó una fuente gubernamental después de la cita.

“No puedo en una hora tomar una decisión que condicionará el futuro del pueblo durante 40 o 50 años”, dijo Yorgos Karatzaferis, líder del partido ultraderechista LAOS y tercer socio del Gobierno, al abandonar la sede del primer ministro en Atenas.

La reunión de Yorgos Papandréu (socialista), Antonis Samaras (derecha) y Yorgos Karatzaferis (ultraderecha) buscaba en especial obtener el consentimiento de los partidos gubernamentales sobre las medidas de austeridad reclamadas por la troika de los acreedores del país a cambio de un nuevo préstamo de 130.000 millones de euros.

Grecia, país de la eurozona al borde de la quiebra, ha recibido presiones en las últimas semanas de sus países vecinos para que apruebe las medidas exigidas por la troika de acreedores (Unión Europea, Banco Central Europeo y Fondo Monetario Internacional).

Si los partidos dan su acuerdo, el programa de reformas deberá someterse a la aprobación del Parlamento, en donde la coalición gubernamental cuenta con la mayoría de la cámara. El Poder Legislativo podría reunirse de urgencia el domingo para someter el plan a votación.

Grecia debe cerrar también un acuerdo con sus acreedores privados para una condonación de unos 100.000 millones de euros de su deuda soberana.