Bruselas
Los partidos ultraderechistas y euroescépticos lograron progresos sustanciales en las elecciones de este domingo para el Parlamento Europeo.
Un primer ministro calificó la tendencia como un "terremoto" político favorable a quienes quieren reducir los poderes de la Unión Europea o abolirla.
Los votantes en 21 de las 28 naciones de la UE fueron a las urnas este domingo a fin de elegir legisladores para la legislatura del bloque de 751 bancas. Los otros siete países ya votaron en comicios que comenzaron el jueves en Gran Bretaña y Holanda.
Uno de los ganadores más significativos fue el partido ultraderechista francés Frente Nacional, que se impuso en Francia con el 26%, unos 4.100.000 votos.
"El pueblo soberano se ha pronunciado... reclamando que desean recuperar las riendas de su destino", dijo la líder del partido Marine Le Pen en una declaración. Calificó los resultados como " el primer paso en una larga marcha hacia la libertad".
El Frente Nacional, al igual que otros partidos ultraderechistas en Europa, se opone a la inmigración y a menudo alienta políticas antisemitas.
El primer ministro francés Manuel Valls, en un apasionado discurso televisado, dijo que la victoria del Frente Nacional " es más que un llamado de atención: es una conmoción, un terremoto".
La oficina del presidente francés Francois Holland anunció que sostendrá conversaciones urgentes el mismo lunes con altos ministros del gobierno en lo que la prensa francesa califica de reunión de crisis.
Toda Europa tendrá que hacer frente a la situación, dijeron analistas y políticos.
Los partidos proeuropeos "deberán tomar muy seriamente lo que significa la votación", advirtió Martin Schulz, del grupo socialista en el parlamento.
Guy Verhofstadt, líder de la bancada liberal en el parlamento Europeo, admitió lo mismo pero señaló que, aun después de la votación, dos tercios de los legisladores europeos serán " gente que está a favor de la Unión Europea".
Pese a las ganancias de los euroescépticos, los partidos establecidos proeuropeos posiblemente seguirán constituyendo las bancadas más numerosas en el parlamento. Se pronostica que el grupo conservador ganará 211 bancas, menos que las actuales 274, aunque suficientes para seguir siendo el más grande.