Washington. EFE. Estados Unidos urgió ayer al Gobierno ruso a llevar a cabo una investigación “creíble e independiente” de las denuncias de fraude electoral en la jornada de comicios presidenciales del domingo.
En un comunicado, el Departamento de Estado mostró su disposición a trabajar con el presidente electo siempre que se certifiquen los resultados y una vez que juramenten su cargo.
No obstante, Washington anunció que está atento a las preocupaciones mostradas por los observadores de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE).
La OSCE denunció que, a pesar de que Putin es “un ganador neto”, la elección de los votantes estaba limitada debido a que la competencia electoral no fue equitativa y faltó un árbitro independiente, fuera del Gobierno.
EE. UU cita “las condiciones en las que se condujo la campaña, el uso partisano de recursos gubernamentales, y las irregularidades de procedimiento el día de la elección”, como posibles situaciones por investigar.
“Urgimos al Gobierno ruso a llevar a cabo una investigación independiente y creíble de todas las violaciones electorales denunciadas”, señaló Washington.
El Departamento de Estado también reconoce “los nuevos pasos que la Comisión Electoral Central (rusa) ha dado para aumentar la transparencia del proceso de votación desde las elecciones parlamentarias”.
“Instamos a las autoridades rusas a seguir avanzando sobre esos pasos para asegurarse de que los procedimientos para las elecciones futuras sean más transparentes”, indica el comunicado.
Además del informe preliminar de la misión de la OSCE, Washington respalda el informe de la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, y reconoce la afirmación de esta última entidad de que las elecciones tuvieron “un claro ganador con una mayoría absoluta”.
El comunicado informa de que el gobierno de Obama alienta estas elecciones, en las que “el número de observadores rusos no tiene precedentes, y es una señal de que la sociedad rusa busca participar en la mejora de las instituciones”, añadió.