Washington. EFE, AP. Los estados del noreste de EE.UU. trabajan contra el reloj para restaurar la normalidad tras la tormenta de nieve que ha golpeado con fuerza desde Nueva York hasta Maine, la cual dejó a su paso al menos 15 muertos, mientras el Medio Oeste se prepara para otro posible temporal.
Por lo menos 11 muertes en Estados Unidos y cuatro en Canadá se atribuyeron a la tormenta, incluida la de un niño de 11 años en Boston, quien se asfixió con monóxido de carbono mientras estaba sentado en el interior de un automóvil en marcha cuando su padre paleaba nieve el sábado por la mañana. Las autoridades emitieron diversas advertencias de seguridad tras la muerte del menor y la intoxicación de otras personas conese gas.
Mientras, el Servicio Nacional de Meteorología alertó de que “una gran tormenta de invierno traerá fuertes nevadas y vientos del noreste de Colorado en el centro de Minesota del domingo al lunes” .
Las autoridades informaron del fin de la tormenta que azotó durante el fin de semana a los estados de Connecticut, Rode Island, Massachusetts, Vermont, Nuevo Hampshire, Maine y Nueva York con intensas nieves y fuertes vientos.
Los equipos de emergencia han trabajado sin descanso para poder volver a la normalidad antes de que hoy los ciudadanos vuelvan a utilizar sus vehículos y el transporte público para desplazarse a sus lugares de trabajo y estudio.
“Estamos trabajando para garantizar que el transporte público esté funcionando a tiempo para mañana(hoy)”, señaló ayer el gobernador de Massachusetts, Deval Patrick.
No obstante, la mayoría de las escuelas de Massachusetts permanecerán cerradas como medida de precaución.