Estados Unidos confirma que régimen de Siria ha usado armas químicas contra rebeldes

Obama ha advertido en varias ocasiones de que el uso de este armamento obligaría a Washington a reconsiderar su posición sobre el conflicto

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Washington. (Agencias). Los servicios de inteligencia de Estados Unidos confirmaron este jueves que el régimen sirio de Bashar al-Asad “ha utilizado armas químicas a pequeña escala contra la oposición en múltiples ocasiones durante el pasado año”.

El Ejército sirio “ha utilizado armas químicas, incluso el agente sarín, múltiples veces en el último año” , lo que viola la “línea roja” que trazó el Gobierno estadounidense, según dijo durante una conferencia telefónica con periodistas Ben Rhodes, el consejero adjunto de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.

Rhodes aseguró que el Gobierno de Barack Obama tomará decisiones sobre cómo responder, según “nuestro propio cronograma”.

De acuerdo con el informe de la inteligencia estadounidense, transmitido hoy al Congreso, entre 100 y 150 personas habrían muerto en ataques realizados con armas químicas hasta la fecha.

“Nuestra comunidad de inteligencia tiene alta confianza en esta evaluación, dados las múltiples y variadas fuentes de información”, indica el informe, que precisa que también ha contado con datos procedentes de otros países aliados como Francia o Reino Unido.

El presidente de EE. UU., Barack Obama, ha advertido públicamente en varias ocasiones de que el uso de armas químicas por parte del régimen sirio supondría cruzar una “línea roja” , que obligaría a Washington a reconsiderar su posición respecto al conflicto civil que sufre el país.

Estados Unidos no ha precisado, sin embargo, qué medidas tomaría.