París. AFP, EFE. El candidato presidencial socialista, François Hollande, salió fortalecido del único debate que sostuvo el miércoles con su rival, el presidente Nicolás Sarkozy, y parece encaminado a triunfar el domingo.
En cambio, la tarea se anuncia difícil para Sarkozy, quien no logró desestabilizar a su rival.
Un punto adicional para Hollande: el exaspirante centrista François Bayrou anunció ayer su respaldo a Hollande, aunque aclaró que que es “ una decisión personal” y no pidió a sus votantes que hicieran lo mismo.
Como sea, ese apoyo resulta sintomático toda vez que proviene de un político tradicionalmenmte aliado con la derecha.
Con más de 3,2 millones de votos, el 9,13 % del total, Bayrou acabó quinto en la primera vuelta de las elecciones presidenciales que tuvo lugar el 22 de abril.
Pese a haber compartido gobierno con Sarkozy a principios de los años 90, Bayrou se negó a darle su apoyo por la deriva hacia la extrema derecha que ha emprendido el presidente saliente, en busca de los 6,5 millones de votos de Marine Le Pen.
Vencedor en el debate. Ese espaldarazo se conoció al tiempo que una encuesta reveló que el 42% de los entrevistados vio al socialista imponerse en el debate .
Únicamente, el 34% consideró vencedor a Sarkozy, de acuerdo con el estudio de la firma Ifop.
Un 10 % dijo que “ni uno ni otro” fue mejor, un 7% indicó que “ninguno de los dos ” logró la victoria y otro 7 % no reveló su opinión.
Además, el sondeo arrojó que solo el 3% de los encuestados que siguieron el debate han cambiado la intención de su voto tras el enfrentamiento dialéctico.
Muy violento pero sin nocaut, el debate de casi tres horas recalcó las diferencias entre los dos políticos, que se respondieron sin miramientos sobre todos los temas, desde la deuda hasta la inmigración, pasando por el estilo de la presidencia.
Ayer, el presidente, quien trató en el debate a su rival de “pequeño calumniador”, calificó el choque de “bastante republicano”.
“Nunca una elección fue tan indecisa” y el resultado de la segunda vuelta se “jugará en el espacio de un pañuelo”, expresó en declaraciones a la emisora RTL.
“Pensaba que sería áspero y lo fue (...), pero el debate giró alrededor de mis propuestas”, sostuvo, por su parte, el socialista François Hollande al canal France 2.
La mayoría de los editorialistas de la prensa consideraban ayer que el debate “no provocará ningún sismo electoral”. El favorito, François Hollande, que los sondeos dan como vencedor con entre 53 y 54% de los votos, “marcó puntos” en materia de estatura de estadista.
La izquierda reivindicó inmediatamente su victoria en el duelo. “Hollande preside el debate”, tituló en primera plana el diario de izquierda Libération.
El diario de derecha Le Figaro, próximo a Sarkozy, cree todavía en la victoria de este frente a “François Hollande, su lenguaje de antes y su izquierda dispar”.
“Eso va a convencer a quienes pudieron dejarse llevar en la primera vuelta a una forma de antisarkozysmo primario”, opinó el ministro de Finanzas, François Baroin.