EFE y AFP
Un adolescente fue rescatado con vida, este jueves, bajo los escombros de un edificio derrumbado en Katmandú tras cinco días del terremoto en Nepal.
Una multitud que esperaba estalló en vítores cuando el chico, que no fue identificado, fue trasladado al exterior en una camilla. Su rostro estaba cubierto de polvo y personal médico colocó una vía en el brazo, así como un collarín azul en el cuello.
El joven parecía aturdido, y parpadeó al verse bajo la luz del sol.
Un equipo de aa Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (Usaid) trabajó en la escena durante la noche para intentar liberarlo.
Andrew Olvera, responsable de un equipo de respuesta a desastres de Usaid, explicó antes de culminar el rescate que el joven no estaba en un lugar muy profundo, pero había quedado atrapado entre dos plantas derrumbadas del edificio.
Balance. El balance del sismo ocurrido el pasado sábado en Nepal se acerca a los 5.500 muertos, según un nuevo balance comunicado este jueves por las autoridades.
Un total de 5.489 personas han perdido la vida por el sismo de magnitud 7,8 que sacudió el país himalayo, indicó el Centro Nacional de Operaciones de Urgencia, y un centenar más perecieron en la India y China.
Las Naciones Unidas lanzaron un llamamiento urgente para obtener donaciones y socorrer a los supervivientes del sismo, que necesitan comida, medicamentos y agua, tanto en Katmandú, la capital del país, como en las regiones rurales.
En tanto, el ministro galo de Exteriores, Laurent Fabius, confirmó hoy que ya son tres los franceses muertos en el terremoto de Nepal del pasado sábado, al recibir en el aeropuerto Charles de Gaulle de París un vuelo de repatriación de 206 personas.
Fabius, en declaraciones divulgadas por la emisora France Info, señaló que está "confirmada" la muerte de ese tercer francés, como lo ha contado su pareja, y añadió que hay otros 200 de los que no se tiene noticias y de los que se sabe que estaban en Nepal en el momento del seísmo.
De los 206 repatriados, 26 están heridos y 12 son niños.
Las autoridades francesas habían fletado el Airbus A350 que aterrizó esta madrugada en París, en el que había esencialmente franceses, pero también una quincena de alemanes, suizos, italianos, portugueses y turcos.