¿Qué es cierto y qué no sobre los incendios en el Amazonas?

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RÍO DE JANEIRO (AP) — En momentos en que arden incendios en la Amazonía brasileña y la ONU organiza una conferencia mundial sobre maneras de revertir el calentamiento mundial, la AP ofrece un vistazo a los temas relativos a la selva amazónica:

¿Por qué es importante la selva amazónica?

Los científicos coinciden en que la mayor selva amazónica del mundo, más o menos diez veces el tamaño de Texas, es un importante factor en la lucha contra el calentamiento global.

Los árboles, por ejemplo, absorben el dióxido de carbono que está en la atmósfera. La selva amazónica absorbe en promedio 2.000 millones de toneladas de dióxido de carbono cada año, evitando que ese gas tape la atmósfera y cause calentamiento ambiental.

Los miles de millones de árboles en la Amazonía también emiten vapor de agua, que genera la densa neblina que cubre la selva. El vapor se convierte en nubes que a su vez provocan lluvia, lo que afecta los sistemas climáticos en Sudamérica y demás partes del mundo.

La Amazonía, de la cual el 60% está en Brasil, es hábitat del 20% de las especies de plantas del mundo, algunas de las cuales no existen en ninguna otra parte.

¿Cuál es el impacto de los incendios y de la deforestación en la Amazonía?

En los últimos dos meses han ardido incendios en la selva brasileña a un ritmo no visto en muchos años.

Datos captados por satélite de la Agencia Espacial Brasileña muestran un agudo aumento de la deforestación y de los incendios forestales el año pasado. En agosto, la agencia advirtió que los incendios en la selva habían aumentado en un 84% en los primeros siete meses del año, comparado con el mismo período del 2018.

Casi el 20% de la selva amazónica ya ha sido deforestada, según Thomas Lovejoy, científico ambientalista de la Universidad George Mason.

Doug Morton, científico de la NASA, dijo que los incendios emanan dióxido de carbono almacenado en los árboles. Esos gases junto con el metano atrapan el aire en la atmósfera, lo que contribuye al calor planetario.

Algunos funcionarios del gobierno brasileño actual cuestionan estos datos, afirmando que los incendios son cosa de rutina ya que los terratenientes queman maleza para sus cosechas, y que la vasta mayoría de la Amazonía está intacta.

¿Qué está haciendo Brasil con respecto a la Amazonía?

Brasil hace poco era considerado un éxito en la protección ambiental. Entre los años 2004 y 2014 se aplicaron nuevas normas ambientalistas que drásticamente redujeron el paso de la deforestación.

Sin embargo, la deforestación empezó a repuntar en años recientes. Las inquietudes en torno a la selva amazónica aumentaron este año cuando ascendió a la presidencia de Brasil Jair Bolsonaro, un político de derechas que prometió diluir las protecciones a tierras indígenas y reservas naturales.

Bolsonaro asevera que lo que quiere es despejar terrenos para ganado y granjas de soya que ayuden al desarrollo del país. Su ministro del medio ambiente, Ricardo Salles, dice que millones de brasileños viven en la Amazonía y tienen derecho de trabajar para ganarse la vida, ya sea en la agricultura o en otras industrias.

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Los críticos denuncian que el nuevo gobierno brasileño está debilitando las instituciones públicas y que se hizo a un lado cuando agricultores prendieron más incendios. En medio del oprobio internacional, Bolsonaro finalmente envió soldados a que ayuden a combatir las llamas y prohibió prender fuegos para despejar maleza por un espacio de 60 días.

¿Qué está haciendo el mundo para defender la selva del Amazonas?

Las imágenes de los incendios y las densas nubes de humo sobre la selva amazónica alarmaron a varios líderes mundiales, entre ellos algunos en Europa que han invertido en programas para proteger la zona.

Sin embargo, los temores internacionales quedaron opacados por la agria disputa entre Brasil y países europeos, lo que amenaza la unidad global para proteger una región que es vital para la salud del planeta.

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Dominó la disputa un intercambio personal entre Bolsonaro y el presidente francés Emmanuel Macron, aunque al mismo tiempo quedó en evidencia la sensibilidad de los brasileños ante temas como soberanía, desarrollo económico y los derechos de los pueblos indígenas. Brasil ha advertido que fijará condiciones antes de aceptar asistencia del Grupo de los Siete, que en agosto ofreció decenas de millones de dólares en asistencia para combatir los incendios y proteger la vegetación.

¿Son los incendios únicamente un problema de Brasil?

No. La selva brasileña es la que ha recibido más atención mundial, pero ha habido incendios en otros países latinoamericanos, particularmente Bolivia. La mayoría de los incendios en Bolivia son en bosques secos, praderas y campos agrícolas en la región de Chiquitanía, aunque algunos han llegado a su región amazónica.

Las autoridades en Bolivia afirman que los agricultores empezaron los incendios para despejar maleza, pero que se descontrolaron debido a la sequía y fuertes vientos. Críticos afirman que un decreto del gobierno boliviano emitido en julio, que permite quemas controladas para fines agrícolas, contribuyó al desastre.

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