Partido de candidato presidencial muerto tiene 10 días para definir sustituto

Campos era tercer lugar en las preferencias

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El Partido Socialista Brasileño (PSB), que había postulado a Eduardo Campos como candidato a la Presidencia de Brasil para las elecciones del 5 de octubre, tiene un plazo de diez días para nombrar un sustituto del dirigente fallecido hoy en un accidente aéreo, dijeron fuentes del tribunal electoral.

Campos, de 49 años y tercero en las encuestas de intención de voto para las presidenciales, falleció este miércoles cuando el avión en que viajaba se estrelló contra unas edificaciones en la ciudad de Santos, a unos 70 kilómetros de Sao Paulo y a donde se dirigía para cumplir con compromisos de su campaña.

En el accidente murieron otros cuatro miembros de su campaña, incluyendo un asesor político y su asesor de prensa, así como los dos pilotos de la avioneta privada.

Pese a que el PSB aún no se ha pronunciado sobre el futuro de la campaña, fuentes del Tribunal Superior Electoral (TSE) de ese país, aclararon que la coalición que postuló al candidato fallecido puede sustituirlo por cualquier integrante de los partidos que apoyaban oficialmente a Campos.

Las mismas fuentes indicaron que el plazo para la sustitución es de diez días y que el sustituto tiene que recibir el apoyo de la mayoría absoluta de la dirección ejecutiva de todos los partidos coligados. La candidatura del dirigente socialista y exgobernador de Pernambuco era apoyada sobre todo por la Red Sustentabilidad, grupo fundado por la líder ecologista Marina Silva, exministra de Medio Ambiente y candidata a vicepresidente en la fórmula encabezada por Campos.

Según la legislación, el sustituto puede pertenecer a cualquiera de los partidos de la coalición desde que la formación a la que era afiliado el candidato fallecido renuncie a su derecho de preferencia.

La muerte de Campos puede darle un nuevo rumbo a las elecciones presidenciales brasileñas debido a que el líder socialista, como tercero en las preferencias, era considerado el fiel de la balanza. Hasta ahora, los sondeos de opinión situaban a Campos con un 10 % de intención de voto, superado por la presidenta brasileña, Dilma Rousseff, candidata a la reelección y favorita con cerca de un 40 %, y el socialdemócrata Aécio Neves, con un 23 %.