Madrid AP y AFP Óscar Espinosa Chepe, un economista y diplomático cubano que rompió con el gobierno de la isla en la década de 1990 y fue encarcelado por sus actividades disidentes, falleció ayer en Madrid, España, a causa de una enfermedad. Tenía 72 años.
Espinosa Chepe murió en el Centro Sanitario de Cuidados Paliativos Fuenfría en Cercedilla, a las afueras de Madrid, donde fue ingresado en la fase terminal de una larga enfermedad de hígado, informó su esposa Míriam Leiva.
Sereno pero ferviente crítico de Fidel Castro, fue detenido con el grupo de 75 opositores en la “primavera negra” de 2003 y pasó 18 meses preso.
Espinosa había llegado a Madrid en marzo con un permiso especial de La Habana para recibir tratamiento por una hepatopatía crónica granulomatosa que, según su esposa, se agravó durante su periodo de encarcelamiento.
Condenado a 20 años de prisión en 2003, Chepe obtuvo la libertad provisional por motivos de salud en noviembre de 2004 y, a principios de este año, coincidiendo con la reforma migratoria realizada por el régimen cubano, consiguió un pasaporte para viajar a la capital española para ser tratado.
Fue tratado durante meses en el Hospital Puerta de Hierro de la capital española, pero los médicos anunciaron en agosto que no había podido revertir la enfermedad.
Su esposa Míriam Leiva no pudo concretar si el cuerpo de su marido será repatriado a Cuba o si recibirá sepultura en España.
Despedida. La información de su muerte llegó rápidamente a Cuba, donde la comunidad disidente reaccionó con dolor.
“Las Damas de Blanco estamos de luto, hemos perdido a un hermano de lucha. Un hombre que ha entregado su vida por una Cuba en democracia”, expresó, por su parte, Berta Soler, líder de esa agrupación disidente femenina.
No hubo comentarios de las autoridades cubanas.
Nacido el 29 de noviembre de 1940 en Cienfuegos, Chepe trabajó desde 1961 hasta 1992 como economista en varios departamentos de la administración cubana, tanto dentro de la Isla como en su diplomacia exterior.
Sancionado en dos ocasiones durante esa época por comentarios contrarios a la política económica castrista, en 1992 fue acusado de ser un “sujeto contrarrevolucionario” y poco después empezó a trabajar como economista y periodista independiente.
En marzo de 2003, Chepe fue uno de los 75 detenidos en la llamada “primavera negra”, los cuales fueron condenados a duras penas de prisión. Liberado un año más tarde hasta que se curara, Chepe siguió escribiendo sobre la situación de su país hasta que en junio de 2012 su enfermedad, estabilizada hasta entonces, se agravó.
Sus artículos fueron publicados en varias naciones, mientras trabajó para Radio Martí, una emisora financiada por Estados Unidos que transmite para la Isla, y que es acusada por las autoridades cubanas de violar el espacio aéreo y la soberanía del país.