Caracas. EFE. El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, dijo el jueves que pidió al Gobierno colombiano una reunión inmediata para atender la “grave” situación en la frontera entre ambos países, tras un ataque en el que fueron heridos tres militares venezolanos y un civil.
Sin dar más detalles, Maduro anunció también que implementará “un marco jurídico nuevo” en la frontera con Colombia, que está cerrada desde el jueves y por 72 horas, según decidió tras la supuesta emboscada del miércoles.
“Hay una perturbación total de la vida de la frontera que debe ser atendida por ambos Gobiernos; por eso, he dado instrucciones a la canciller Delcy Rodríguez para que, de manera inmediata, coordine con la Cancillería colombiana una reunión especial”, manifestó Maduro.
La reunión tiene como objetivo que ambos Gobiernos “de manera muy rápida, asuman este tema y tomen un conjunto de medidas para ver toda esta situación que, sin duda, ha desbordado la frontera y afecta la paz y la tranquilidad del pueblo de Venezuela”, indicó.
‘Fecha próxima’. En Bogotá, la canciller María Ángela Holguín señaló que conversó con su homóloga venezolana y fijaron una reunión en “fecha próxima”.
[[BEGIN:INLINEREF LNCVID20150820_0021]]Holguín también expresó[[END:INLINEREF]] que el cierre de la frontera decretado por Nicolás Maduro es “una decisión soberana”.
Maduro anunció el miércoles el despliegue de maniobras especiales de seguridad y el cierre de la frontera por 72 horas, luego de que los miembros de una patrulla militar venezolana resultaran heridos en un enfrentamiento con presuntos contrabandistas.
El mandatario llamó al Gobierno colombiano a hacer cumplir los acuerdos a los que llegó hace más de un año con el presidente Juan Manuel Santos, en Cartagena de Indias, para la coordinación en la lucha contra el contrabando fronterizo, el comercio o el pago de deudas.
“Con mucha firmeza, con mucho equilibrio, con mucha sabiduría, con mucha capacidad política el Gobierno de Colombia, junto a nuestro Gobierno, tiene que hacer valer los acuerdos de Cartagena”, dijo el presidente venezolano.
Maduro ordenó el despliegue de efectivos de seguridad en la zona fronteriza de San Antonio y Ureña, en el estado Táchira, donde se realizó el ataque.
El primer objetivo es “capturar a los asesinos que emboscaron a nuestros jóvenes militares”, expresó.
Asimismo, aseguró que pronto anunciará nuevas medidas de seguridad para “ir formulando una política superior de estabilización de la frontera”.
Maduro pidió el apoyo a todas las decisiones que tomará para “elevar al máximo nivel la presencia de la fuerza del Estado, la presencia militar, policial y asegurar la vida y la tranquilidad de nuestro pueblo en la frontera”.
Venezuela y Colombia comparten una porosa frontera de 2.219 kilómetros, en la que existe un fuerte contrabando de todo tipo de productos, sobre todo desde Venezuela hacia Colombia, debido a la gran diferencia de precios entre ambos países que deja amplios márgenes de ganancia a los contrabandistas, enormes en el caso del combustible.
Migración. Por otra parte, Maduro aseguró que su país está llegando “al límite” para poder soportar la inmigración masiva de colombianos, que, afirmó, “solo es comparable” al éxodo de africanos y asiáticos hacia Europa.
Según Maduro, mientras el año pasado accedieron 160.000 africanos al Viejo Continente, a Venezuela lo hicieron 144.000 colombianos, y solo de enero a julio del 2015, más de 121.000 se han establecido en el país.
“Se trata de un pueblo que viene casi sin educación, sin un medio en el bolsillo, los pobres de la tierra huyendo de la violencia, de la guerra y de la miseria y buscando en la Venezuela socialista la protección de la seguridad social integral gratuita y pública”.
El polémico expresidente colombiano Álvaro Uribe comentó ante estas declaraciones: “Yo diría que no hay nada más peligroso que un fracasado en apuros, como está Maduro”.