Ban Ki-moon exige a Israel frenar la colonización de Jerusalén Este

Secretario general de ONU molesto por plan para construir 2.500 viviendas

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Jerusalén. EFE, AP El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, criticó ayer al primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, por las colonias judías en territorios palestinos y lo urgió a mostrar “liderazgo” y comprometerse con la paz.

De manera inusitada, Ban utilizó ásperos términos durante su visita a Jerusalén donde denunció la más reciente medida para la construcción de viviendas israelíes en territorios ocupados como “una clara violación de las leyes internacionales”.

Ban se refería a la reciente aprobación, por parte del gobierno de Netanyahu, de un plan para construir 2.500 hogares en Givat Hamatos. Las obras completarían una zona de residencias judías en el este de Jerusalén, lo que representa otro obstáculo para el objetivo palestino de establecer su capital en esa área, ocupada por Israel en la guerra de los Seis Días , de 1967.

“Eso no envía las señales correctas y llamo al Gobierno de Israel a dar marcha atrás en esas actividades”, manifestó Ban, quien estaba al lado de Netanyahu. “La situación no es sostenible. Queda claro que las partes deben regresar a la mesa de negociación, con la disposición para hacer compromisos duros pero necesarios”.

Hace dos semanas, y tras conversar sus dirigentes con el presidente de EE. UU., Barack Obama, que también pidió detener los asentamientos, Israel anunció nuevos permisos para construir más de 2.000 viviendas en el barrio de Beir Safafa, en Jerusalén Este.

Ban, que en la mañana pidió también el fin de la ocupación israelí durante su reunión en Ramalá con el primer ministro del Ejecutivo de reconciliación nacional palestino, Rami Hamdala, también expresó su preocupación por las provocaciones en los lugares santos de Jerusalén, en alusión a la Explanada de las Mezquitas, cuyo acceso Israel cerró el domingo a los palestinos menores de 50 años.

“Las líneas para un acuerdo están claras y el destino final es conocido por todos. Una acción unilateral no es base para el futuro. La solución de los dos Estados es la única vía para llevar la paz a los dos lados”, concluyó Ban.

En respuesta a las posiciones de Ban Ki-moon, el presidente de Israel, Reuven Rivlin, insistió en que el fin del bloqueo a Gaza está condicionado a la seguridad de Israel. “Solo puede ocurrir una vez que hallen una vía para desmantelar la capacidad terrorista de Hamás y garantizar al pueblo israelí una vida segura”, afirmó .

Por su parte, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, se enfocó en criticar la decisión de la Autoridad Nacional Palestina (ANP) de buscar el reconocimiento del Estado palestino en la Organización de las Naciones Unidas (ONU). “No servirá para lograr la paz, sino que tendrá efecto contrario”, dijo.

La ANP ha puesto en marcha un mecanismo en la ONU para exigir el fin de la ocupación israelí de Palestina a partir de noviembre del 2016 y la declaración del Estado de Palestina en las fronteras que existían en 1967.

Explanada de conflictos. Netanyahu culpó a “extremistas palestinos” de los disturbios que se repiten desde hace meses en la explanada de las Mezquitas, el lugar más conflictivo de Jerusalén, al tratar de responder a las críticas de Ban.

En la madrugada de ayer, fuerzas israelíes penetraron en la Explanada donde se enfrentaron con un grupo de jóvenes palestinos, informó la Policía local.

“De lo que somos testigos es de extremistas palestinos que instigan la violencia por medio de la provocación. La provocación se extiende a causa de los falsos rumores de que amenazamos los lugares santos musulmanes”, expuso Benjamín Netanyahu.

El Gobierno jordano, que tiene la soberanía sobre la explanada de las Mezquitas, advirtió a Israel de que “actuará con firmeza” ante la escalada de “agresiones israelíes” contra la mezquita de Al-Aqsa, tercera en importancia para el islam.

“Jordania actuará con firmeza ante la escalada israelí contra los lugares sagrados en Jerusalén , lo que podría llevar a una guerra religiosa y al extremismo en la región”, señaló el portavoz del Ejecutivo, Mohamed Momani.

“Tomaremos todas las medidas políticas y legales necesarias para romper el sitio impuesto a la mezquita de Al-Aqsa y para obligar a Israel a respetar el tratado de paz”, suscrito en 1994, añadió.