Avalancha deja al menos 52 muertos en noreste de Colombia

Siguen operativos de búsqueda de desaparecidos y la atención a afectados

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Salgar, Colombia. AFP. Al menos 52 muertos y 37 heridos dejó un deslizamiento de tierra ocurrido en la madrugada de ayer, luego de fuertes lluvias que desbordaron un río en el municipio de Salgar, al noroeste de Colombia, donde hoy continúa la búsqueda de desaparecidos y el auxilio a los damnificados.

“Son 52 personas fallecidas y 37 heridas tras la avalancha de la quebrada La Liboriana”, informó ayer, en su último balance, la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres, que lidera las operaciones de unos 166 socorristas.

Esta cifra de fallecidos es aproximada, pues los datos de las agencias de información no coinciden en la cantidad.

El deslave de piedras, troncos y lodo se produjo tras intensas precipitaciones en los últimos días en este municipio, de topografía montañosa y surcado por múltiples cursos de agua, ubicado a unos 100 kilómetros al suroeste de Medellín .

El deslizamiento de tierra arrasó el poblado de La Margarita, uno de los cuatro del municipio, que prácticamente “quedó borrado del mapa”, dijo la alcaldesa de Salgar, Olga Osorio, a RCN Radio .

La tragedia, que, según las autoridades, ha afectado a unas 30 familias y dañado 31 viviendas , sorprendió a los vecinos mientras estaban durmiendo.

“Estábamos en la cama cuando sentimos la fuerza de la quebrada. El agua y los palos no nos dejaban abrir la puerta, pero, en un desespero, mi hijo la tiró abajo y logramos escapar. Estamos vivos de milagro”, contó Consuelo Arredo, de 66 años, muy consternada, aunque aliviada de tener a su familia a salvo.

Las autoridades temen que el número de muertos siga aumentando, ya que la zona, declarada de calamidad pública, se encuentra anegada y cubierta de barro y escombros.

Fuerte trabajo. En el lugar, sin servicio de agua potable, electricidad ni gas tras la emergencia, varios vecinos retiraban, a paladas, barro del interior de sus casas para recuperar los pocos enseres que podían, en tanto volquetes removían restos del alud.

Rescatistas, perros especializados, estuches de ayuda humanitaria y agua potable fueron enviados a la zona, donde viven 17.600 personas, informó Ana Carolina Gutiérrez, vocera de la Cruz Roja, que inició una recolecta de alimentación y cobijas en Medellín.

Filas de familiares esperaban frente al cementerio de Salgar, adonde eran llevados los cuerpos recuperados, muchos de ellos mutilados y entre los que se veían restos de niños, constató un fotógrafo de la AFP.

“Nadie les va a devolver a los muertos; eso es algo que lamentamos profundamente; acompañamos a las familias. Pero tenemos que salir de ese desastre y mirar para adelante con fortaleza”, dijo en rueda de prensa el presidente Juan Manuel Santos , tras reunirse con autoridades luego de sobrevolar la zona de la tragedia.

El jefe de Estado anunció el pago de una indemnización de 16 millones de pesos (unos $7.000) a cada familia damnificada y prometió obras de mitigación de riesgo para evitar catástrofes similares en el futuro.

Los deslaves y aludes por fuertes lluvias son usuales en Colombia, vulnerable, por su ubicación y geografía, a numerosos desastres naturales. Entre el 2010 y el 2011, el país sufrió una ola invernal acentuada por el fenómeno La Niña, que causó inundaciones y avalanchas.