Amnistía Internacional denuncia casos impunes en Venezuela

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Madrid. AFP. Manifestantes que fallecieron por disparos de policías o grupos progubernamentales, torturas y vejaciones sexuales, detenciones arbitrarias, represalias por denunciar abusos... La organización no gubernamental Amnistía Internacional (AI) denuncia “impunidad” en Venezuela un año después de las protestas en las que murieron varias decenas de personas.

“La inmensa mayoría de las violaciones de derechos humanos en Venezuela no son investigadas y sancionadas”, aseguró la ONG en un informe presentado ayer en Madrid llamado Venezuela, los rostros de la impunidad . “A un año de las protestas, las víctimas aún esperan justicia”, agregó.

“Esta situación ha llevado a que se abra la puerta a más abusos y episodios de violencia e impunidad”, dijo, en conferencia de prensa, Esteban Beltrán, director de AI en España, quien señaló el “uso excesivo de la fuerza” en las recientes protestas en Táchira, donde murió el joven Kluiverth Roa , de 14 años, y cinco manifestantes resultaron heridos.

También “la reciente detención del alcalde de Caracas , Antonio Ledezma, en circunstancias que parecen sugerir que habría una motivación política”, manifestó la experta en derechos humanos Nuria García, autora de la investigación.

En sus 47 páginas, el informe recaba 21 testimonios sobrecogedores de abusos cometidos en las protestas que se llevaron a cabo de febrero a julio del 2014.

“Nos pusieron en posición fetal, arrodillados y nos golpearon, nos golpearon, nos golpearon. A mí me bajaron el bóxer y me metieron algo por atrás”, relató para el informe Juan Manuel Carrasco, de 21 años, detenido el 13 de febrero en Valencia.

Las protestas habían estallado el 4 de febrero de 2014 en San Cristóbal, en el oeste de Venezuela, por falta de seguridad entre estudiantes universitarios.

Después derivaron en masivas movilizaciones callejeras en todo el país contra la situación económica y la escasez, a las que se opusieron contramanifestaciones a favor del gobierno de Nicolás Maduro.