Argentina rechaza que el FMI revise sus estadísticas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Buenos Aires (AFP). El Gobierno argentino considera inaceptable que el Fondo Monetario Internacional (FMI) realice una auditoría de sus estadísticas, afirmó este lunes el viceministro de Economía, Roberto Feletti.

"Argentina está dispuesta a enviar los informes que tenga que enviar (al FMI) del mismo modo que lo hacen todos los países del G-20, pero no parece racional o aceptable que se haga una compulsa o una auditoría sobre esas cifras, que por otra parte están reflejando la realidad", dijo Feletti.

La declaración del alto funcionario contradice el anuncio realizado por el FMI en Washington de que estudia con Argentina enviar una misión técnica para colaborar con el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC), acusado de manipular las cifras, entre ellas la de inflación.

"La intervención (del FMI) entorpece el proceso de normalización del INDEC", dijo Feletti a radio América, al recordar el proceso iniciado en 2007 con la intervención del organismo, lo que motivó numerosas denuncias judiciales contra el Gobierno por supuesta intromisión y tergiversación de los guarismos.

Los gobiernos peronistas socialdemócratas del ex presidente Néstor Kirchner (2003-2007) y de su esposa, la presidenta Cristina Kirchner, coincidieron en descalificar al FMI por promover políticas de ajuste y contrarias al desarrollo independiente.

Argentina dejó de estar bajo supervisión de la entidad multilateral en 2006, cuando Néstor Kirchner canceló en un sólo pago la deuda que mantenía por 9.500 millones de dólares.

Si Argentina finaliza la normalización de su deuda pública con el segundo canje de bonos en marcha, sólo le quedará arreglar un 'default' (cesación de pagos) por $6.500 millones con las potencias del Club de París, pero la institución le reclama como condición estar bajo auditoría del FMI.