Pattani, Tailandia. (AFP). Al menos seis personas murieron y 41 resultaron heridas hoy en la explosión de un coche bomba en un mercado en el sur de Tailandia, donde una rebelión separatista ha causado miles de muertos desde hace ocho años, indicaron responsables policiales.
“Ahora hay seis personas muertas, tres hombres y tres mujeres”, dijo en Bangkok una portavoz del ministerio de Salud, en un nuevo saldo que pudo ser confirmado por el hospital de Sai Buri, en la provincia de Pattani, donde ocurrió la explosión.
De acuerdo con la misma fuente, “en total 41 personas han sido heridas, por esquirlas o quemaduras”. Entre ellas, 19 personas fueron heridas “gravemente” y trasladadas a otros hospitales de la provincia.
En el hospital de Sai Buri, completamente desbordado, un fotógrafo relató una escena de caos, con víctimas heridas de extrema gravedad y cuerpos quemados, así como enormes manchas de sangre en el suelo.
La explosión ocurrió coincidiendo con las oraciones de hoy en esa región de mayoría musulmana. La bomba estaba oculta en un automóvil, afirmó el portavoz del ejército en el sur del país, coronel Pramote Prom-in.
“Los insurgentes abrieron fuego contra un comercio para distraer a la policía y al personal de seguridad, y aprovecharon la confusión para acercar el auto y haber estallar la bomba”, dijo.
En el lugar del atentado se veían autos carbonizados, edificios dañados y parcialmente incendiados, motos y bicicletas retorcidas y manchas de sangre.
Las autoridades tailandesas habían admitido contactos con los líderes insurgentes.
“No llamen a esto ‘negociaciones’. Son conversaciones destinadas a obtener la paz, un objetivo crucial del gobierno”, había dicho a fines de agosto el vice primer ministro encargado de la seguridad nacional, Yutthasak Sasiprapa.
Analistas independientes, sin embargo, son escépticos con relación a la posibilidad de un acuerdo de paz en un futuro próximo.