Grecia y sus acreedores ven reformas económicas

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Bruselas. AP. Con un plazo financiero próximo a vencer, Grecia está batallando para convencer a sus acreedores de que tiene reformas económicas viables y le liberen recursos urgentes para evitar que el país se vaya a la bancarrota.

Sin ayuda extranjera, Atenas afronta la posibilidad de irse a la quiebra en los próximos meses. Un acuerdo con los acreedores asegurará la recién acordada extensión de cuatro meses a julio.

Margaritis Schinas, portavoz de la Comisión de la Unión Europea, manifestó ayer que un aval sobre las reformas todavía “requiere mucho trabajo técnico”. Un acuerdo deberá liberar la siguiente ronda de recursos para Grecia, alrededor de 7.000 millones de euros (unos $7.577 millones).

En pugna. Atenas ha dependido de fondos de ayuda desde hace casi cinco años. A cambio, sucesivos gobiernos han tenido que imponer medidas de austeridad, como recortes al gasto y en las pensiones.

Oponerse a la austeridad fue la principal razón por la que el primer ministro, Alexis Tsipras, y su partido Syriza ganaron las elecciones en enero.

Los griegos atribuyen a la austeridad el hecho de que la economía griega se contrajera, mientras el desempleo y la pobreza se dispararon.

En un reconocimiento al cambio de situación política en Grecia, a Tsipras se le permitió elaborar sus propias reformas, pero solo si el efecto neto sobre el presupuesto es el mismo establecido en la actual prescripción del rescate. Su gobierno se está enfocando en combatir la corrupción y la evasión fiscal.

Pero el tiempo es oro. Atenas afronta vencimientos por casi 3.000 millones de euros ($3.300 millones) en abril, la mayoría a mediados del mes. Esta cantidad aumentará en julio.

Como Grecia no puede recurrir a los mercados de capital para obtener dinero, depende de los acreedores internacionales para poder pagar sus deudas.