El proceso de “Consolidación fiscal” sigue en etapa de diálogo nacional, sin que se cristalicen todavía propuestas específicas para atacar el problema fiscal.
Edgar Ayales, ministro de Hacienda, había expresado la intención de presentar a mediados de enero un documento con medidas puntuales, antes de las elecciones presidenciales.
Sin embargo, las rondas de reuniones y foros se han extendido y el proceso de síntesis de las propuestas finalizaría en febrero.
La ausencia de un documentofinal no impidió que Ayales enumerara ayer, en conferencia de prensa, los puntos que han generado mayor consenso.
En el frente de los ingresos tributarios, una de las medidas que despierta acuerdos es la transformación del Impuesto General de Ventas (IGV) en un Impuesto de Valor Agregado (IVA) que grave la prestación de servicios.
También el fortalecimiento de renta, mediante el uso de información proveniente del IVA y la globalización de todas las fuentes de renta ha generado aceptación en varios sectores.
Estas modificaciones a los dos pilares recaudatorios no eliminan la necesidad de mejorar la administración tributaria en sus tareas de recaudación y lucha contra el contrabando.
Gastos. El diálogo también ha desnudado la urgencia del clamor por el control presupuestario en el Gobierno.
Por esto la implementación de un mecanismo legal que garantice la responsabilidad fiscal del Ejecutivo, el Poder Judicial y la Asamblea Legislativa son acciones avaladas por sectores involucrados en el diálogo nacional.
En la mira también está la regulación de la dinámica salarial del Gobierno Central, especialmente los pluses salariales y la inequidad en las remuneraciones del Sector Público.
“Hemos encontrado aceptación en cuanto a la convergencia de los regímenes de pensiones con cargo al prespuesto de la República y el regimen de Invalidez, Vejez y Muerte”, explicó el jerarca.
Hacienda espera que la etapa de formulación de proyectos de ley se desarrolle entre febrero y mayo de este año.