Para algunos viajeros aéreos, el wifi es ahora una necesidad

El acceso a Internet wifi aumentó a 153 millones de pasajeros en 2011, frente a 153.000 en 2009, según Gogo Wireless

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Tony Drockton, que es dueño de una compañía de bolsos de lujo en el sur de California, acostumbraba tomar el vuelo de la noche a Nueva York, para no perder horas laborales sin conexión.

Sin embargo ahora, su horario de vuelo es su horario de trabajo conforme las aerolíneas ofrecen cada vez con más frecuencia conexiones wifi en sus aviones.

“Necesito estar conectado para que la gente no se dé cuenta de dónde estoy”, dijo Drockton, que ahora viaja con una laptop , un teléfono inteligente y audífonos.

En cuanto a los viajeros que disfrutaban de unas horas de desconexión con la oficina, esos días podrían estar llegando a su fin. Antes del wifi, “uno tenía una excusa para no estar en contacto si no quería estarlo”, dijo Henry H. Harteveldt, cofundador de Atmosphere Research Group, un analista de la industria de viajes y aerolíneas en San Francisco.

A medida que las aerolíneas compiten para crear conectividad en vuelos internacionales a través del wifi satelital, la capacidad para estar en línea en el cielo tenderá a aumentar, dicen los expertos.

“Los pasajeros tienen la expectativa de una conectividad ubicua en sus vidas, especialmente los viajeros jóvenes”, dijo Harteveldt. “(...) les frustra cuando se suben a un avión y les dicen que están desconectados. El viajero quiere tener control sobre cuándo se conecta a Internet”, añadió.

Otros se hicieron eco de su análisis. “La gente quiere estar conectada las 24 horas del día, los siete días de la semana”, dijo Jonathan Kletzel, analista de transporte y logística en PWC. “Es cuestión de si las aerolíneas están adelantándose a la curva o no”.

Aumento. Por ahora, el uso de la tecnología en el cielo sigue siendo menos que en otros medios de transporte, dijo Joseph P. Schwieterman, director del Instituto Chaddick para el Desarrollo Metropolitano en la Universidad DePaul en Illinois.

Aun así, el acceso a Internet wifi se ha ampliado a 153 millones de pasajeros en el 2011 en comparación con los 153.000 en el 2009, según Gogo Wireless, un proveedor de wifi para aerolíneas.

Según un informe dado a conocer este año por el Instituto Chaddick, el porcentaje de viajeros aéreos que usan la tecnología en “puntos seleccionados al azar” en un vuelo fue de 28,4% en el 2011, respecto de 23,2% en el 2010 y 17,6% en el 2009.

El informe concluyó que más viajeros estaban llevando consigo sus propios dispositivos, incluidos tabletas y lectores electrónicos, en los aviones. Uno de cada 12 pasajeros aéreos está usando ahora una tableta y esa cifra continúa creciendo. Las tabletas representan casi 30% de todo el uso de tecnología en vuelos comerciales, y también es probable que ese porcentaje aumente. Su uso, así como el de otras tecnologías, en general, tiende a ser significativamente más alto en los vuelos orientados a negocios, indicó el informe.

Esto deja a más de 70% de los pasajeros que no están usando un aparato, y quizá estén usando opciones de entretenimiento a bordo, dijo Schwieterman.

El wifi se remonta comercialmente a hace cuatro o cinco años. Ahora, nueve aerolíneas comerciales tienen servicio de wifi aire-tierra en todos o algunos de sus vuelos nacionales. Las tarifas dependen de la longitud del vuelo, y tienden a ir de $1.95 a $19 o más, según Gogo.

Los viajeros están usando la conexión para hacer más que enviar correos electrónicos. Lo que los viajeros quieren, especialmente los de negocios, son muchos métodos para seguir siendo productivos y entretenerse mientras están en ruta hacia su destino, dijeron expertos en aerolíneas. Quizá usen sus propias laptops o tabletas y el sistema de entretenimiento a bordo.

Drockton, por ejemplo, dijo que usa el correo electrónico, la videoconferencia aire-tierra, el sistema de mensajes instantáneos de la aerolínea y el sistema de entretenimiento en el respaldo frente a él cuando está volando. Dijo que depende del enchufe de electricidad bajo su asiento para mantener cargada su laptop .

“Me conecto aun antes de que hayan cerrado la puerta”, dijo. “Estoy listo para trabajar antes de despegar”.

Cambio de enfoque. Hasta hace unos años, las aerolíneas eran un “páramo tecnológico”, dijo Schwieterman. Ahora, la mayoría de las aerolíneas importantes, incluso aquellas que llegaron tarde al wifi, se han esforzado por asociarse con uno de los cuatro principales proveedores de wifi. Las aerolíneas “quieren que uno sepa que hay wifi en el vuelo”, dijo. “Saben que lo necesitan para posicionar su marca”, agregó.

Sin embargo, la conectividad de Internet a bordo tiene sus inconvenientes, aunque Harteveldt y otros viajeros frecuentes dijeron que esperaban que mejore en su próxima generación. “Si el sistema de wifi alcanza el tope, se vuelve lento”, dijo Harteveldt. “Uno puede desconectarse y no ser capaz de conectarse de nuevo, o ser rebotado por el sistema”.

Típicamente, la amplitud de banda del wifi en un avión de un solo pasillo como un Boeing 737 o un Airbus A-320 puede manejar a 25 usuarios a la vez.

Si un viajero empieza a descargar un archivo grande, el sistema se vuelve lento.

Kevin P. Nichols, de 39 años de edad y director de estrategia de contenido de SapientNitro, dijo que esa había sido su experiencia. “Es inconsistente, y nunca se sabe si va a funcionar o no”, dijo.

Nichols aseveró que el wifi y el entretenimiento a bordo ofrecido por las aerolíneas estaban entre los factores que consideraban ahora los viajeros. “Hay muchos factores por tomar en cuenta al seleccionar una aerolínea”, manifestó. “La gente quiere tener acceso a lo que desee. Continuamente queremos estar conectados”.

En cuanto al futuro de la tecnología a bordo, Harteveldt dijo que dependía de los desarrollos tecnológicos, las preferencias de los viajeros y los presupuestos de las aerolíneas. Las líneas aéreas tienden a actualizar las cabinas cada cinco años. Harteveldt predijo que, dentro de 10 años, los vuelos serían un ambiente de entretenimiento personalizado, es decir que cada quien llevará sus dispositivos.

Hasta entonces, los viajeros que quieran seguir siendo productivos y entretenerse en camino a sus reuniones de negocios dependen del wifi. O, como dijo Drockton: “Se trata de conveniencia y conectividad. La necesito para trabajar”.