Panamá. DPA. La economía panameña crecerá un 4,5% en el 2010, pero para que la banca “flexibilice” el crédito el Gobierno debe ejecutar políticas económicas y fiscales que consoliden la confianza en el sistema, ante la compleja realidad financiera internacional.
Así lo declaró el economista Aristides Hernández, coautor de un estudio de la firma consultora BDO Panamá, sobre la realidad económica mundial, regional y nacional, que sirve de marco de reflexión ante la proximidad de una reforma tributaria que incluye al sector bancario en este país.
Las estimaciones de BDO Panamá, para el 2010, sugieren que el PIB crecerá 4,5 por ciento, dinamizado por las obras de expansión del Canal de Panamá, el turismo, la apertura en el sector de las telecomunicaciones, los puertos, el transporte y otras inversiones.
Hernández señaló que hasta diciembre del 2009, los contratos adjudicados alcanzaban los $3.708 millones, una cifra que rebasa los niveles históricos. Advirtió que la disciplina fiscal es clave para obtener ahorros corrientes.
El viceministro de Economía, Frank de Lima, pronosticó un crecimiento este año por el orden del 5%, mientras que la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) pronosticó que Panamá crecerá 4,5% por encima del promedio regional (4,1%).
Razones. Hernández resaltó que la economía panameña se desaceleró en el 2009 debido a la cautela de la banca para expandir el crédito.
El crecimiento del producto interno bruto (PIB) en el 2009 fue estimado por BDO Panamá en un 2,5% sobre la base de datos de la Contraloría General de la República.
La desaceleración del crédito fue percibida especialmente en la Zona Libre de Colón, que cayó 12% de enero del 2007 a octubre del 2009. Asimismo, resultaron afectadas las actividades de servicio, la industria y el consumo personal.
Un informe del Ministerio de Economía y Finanzas anunció que el déficit fiscal del sector público no financiero no superará el 1,5% en relación con el PIB nominal del 2009.