Fórmula 1 apuesta $500 millones en Las Vegas

Precios de las entradas más baratas rondan los $500. Evento que se realiza en el centro de Las Vegas dejará beneficios económicos estimados en $1.300

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Bogotá. Liberty Media, el conglomerado de medios, dueño de los derechos comerciales de la Fórmula 1, ha lanzado los dados enLas Vegas, Estados Unidos, la capital de la lujuria y las apuestas y los juegos de azar, conocida también como ‘la ciudad del pecado’. O, más políticamente correcto, la autodenominada capital mundial del deporte y el entretenimiento. Y los ha lanzado en una arriesgada apuesta de $500 millones.

El nuevo Gran Premio (GP) deLas Vegasde Fórmula 1 que se corre este fin de semana es solo el arranque de un plan de Liberty Media para reintentar conquistar al público estadounidense, que le ha sido esquivo durante años.

Los estadounidenses aman los óvalos de Nascar y la IndyCar Series, pero con la F1 hay cierta distancia, a pesar de que en su territorio se disputan en el actual calendario el Gran Premio de Los Estados Unidos en Austin, Texas, en el Circuito de las Américas, y desde el año pasado el GP de Miami, en el Miami International Autodrome.

El GP de Las Vegas se sale de todas las reglas que ha impuesto la F1 a todas las ciudades y países que aspiran o han aspirado a tener una carrera. A Barranquilla, por ejemplo, según un informe de la revista Forbes le costarían $971 millones los derechos para realizar las 10 competencias más los gastos operativos de cada una de ellas. Miami ya desembolsó $396,2 millones por su Gran Premio.

En este caso es diferente porque es la propia comercializadora de la F1 la que asumió los elevados costos del desarrollo del circuito, el enorme montaje de sus accesorios, de las barreras de seguridad, las facilidades para el público y la convivencia con dueños de zonas privadas que la pista ocupa transitoriamente, negociar con la famosa esfera ciertas horas de exclusividad e invertir mucho dinero promoviendo la carrera, y lo hará durante al menos diez años.

¿Por qué Las Vegas? Liberty Media debe tener claras las cosas para embarcarse en esta apuesta. Sus cálculos indican que Las Vegas es un lugar que generará una atención masiva no solo en Estados Unidos, que es el mercado de crecimiento prioritario de la F1, sino también a nivel mundial.

La carrera atraerá a muchas celebridades, invitados VIP, e incluso habrá algunos fanáticos comunes, o al menos aquellos que pueden permitirse los altísimos precios de las entradas, $500 las más baratas, que los organizadores justifican debido a las experiencias premium que se ofrecen.

No obstante, en los últimos días los precios han bajado porque la demanda no había copado las sillas. La apuesta también le brindará a la Fórmula 1 amplia cobertura mediática en todo el mundo y se estima que tendrá un beneficio económico para la ciudad de $1.300 millones.

Todo esto tiene un costo significativo, que ha aumentado, por un lado, debido a las condiciones económicas prevalecientes en todo el mundo y, por el otro, por las medidas adicionales de seguridad y tráfico necesarias que han tenido que implementar. Y el arranque es en subida, porque en un acuerdo a diez años, en el primero los costos son mucho más altos.

En el último balance, la F1 informó que había invertido $280 millones solo en la construcción de boxes y del circuito. El edificio albergará exhibiciones permanentes, lo que significa que la F1 tendrá una presencia diaria en Las Vegas fuera del fin de semana del Gran Premio.

El costo total estimado de este arranque alcanzará los $500 millones de dólares. Hasta el pasado mes de setiembre, Liberty Media publicó cifras que sitúan el gasto en $435 millones. Y sea que se alcance o no esa cifra, lo cierto es que el conglomerado ha hecho una gran apuesta para que Las Vegas tenga éxito, pero sobre todo, la F1 necesita desesperadamente que funcione.

Algo que algunos ponen en duda. “No tengo muchas ganas de que llegue el fin de semana… no creo que esto tenga que ver con la Fórmula 1″, dijo Bernie Ecclestone, exdirector del grupo Fórmula 1.

Una carrera ‘pintoresca’

La carrera se apoderará de Las Vegas, con los autos corriendo por el icónico Las Vegas Boulevard, más conocido como The Strip o Las Vegas Strip, que es donde estará el circuito urbano. En este lugar se encuentran 61 casinos de los 144 que hay en la ciudad. Además, cuenta con más de 175.000 máquinas tragamonedas y 500 iglesias de matrimonio exprés.

La expectativa es que tener un Gran Premio que pase por los legendarios hoteles y casinos de la ciudad, que han protagonizado innumerables películas y programas de televisión, impulse el crecimiento de la F1, particularmente en Estados Unidos.

Lo que tenía claro la organización para que esto funcionara es que era necesario apoderarse del centro de Las Vegas. La F1 aprendió la lección de las competencias celebradas en el estacionamiento del hotel Caesar’s Palace en 1981 y 1982 que fueron un fracaso. A nadie en Las Vegas le importaba, no aportaba muchos beneficios económicos y los pilotos, equipos y aficionados lo odiaron.

La ilusión de tener un ‘Mónaco’ en Estados Unidos se esfumó. Los pilotos criticaron con dureza el circuito de 14 curvas que no variaban, las rectas y la figura del trazado no generaba un reto para los pilotos ni tenían un cambio de altura. Para los aficionados era una carrera monótona, y lo único bueno era que podían verla desde cualquier punto de la gradería. “Creo que fue probablemente el circuito de Gran Premio menos atractivo en el que competí”, comentó el expiloto John Watson.

Pero eso fue en el pasado y se han hecho esfuerzos para no repetir la historia. Pero, si bien ubicarlo en medio de Las Vegas en plena vía pública garantiza que el evento de 2023 sea diferente al antiguo Gran Premio del Caesar’s Palace, ha causado interrupciones y descontento entre los residentes.

En el GP de Las Vegas hay más cosas fuera de lugar que en los tradicionales GP de la F1. Este se correrá a las 10:00 p.m.. Todo el calendario del fin de semana es extraño, con carreras en pista los jueves, viernes y sábados y sin pruebas de apoyo, lo que despierta muchas inquietudes entre los equipos y pilotos por el comportamiento de los neumáticos en un asfalto ‘crudo’, y de los motores.

Pero no es solo el dinero lo que está en juego.Las esperanzas están puestas en que el GP de Las Vegas se convierta en evento deportivo icónico, que sea una sensación en las redes sociales, pero, lo más importante, un cambio sustancial en la forma en que la F1 se promociona a sí misma.

Si al detenerse los dados, los números favorecen la apuesta de Liberty Media, Las Vegas y la F1 recibirán una buena cantidad de dinero, publicidad y experiencias de carrera. Esto, dicen los expertos, tendría un impacto en la estrategia de la F1. Y si fracasa, será un golpe no solo económico sino también para sus planes de crecimiento.