La Ley Antitabaco cumplió más de un año de haber entrado en vigencia, sin embargo, para la Cámara de Detallistas y Afines lo más complejo está por venir, cuando entre en vigencia los relgamentos que hagan cumplir la norma, como el etiquetado de los productos de tabaco y sus derivados firmado a principio de julio.
Ana Tereza Vázquez, directora ejecutiva de la Cámara, comentó que en los próximos dos meses verán incrementado el problema de "inseguridad jurídica" que resienten los detallistas, al empezar a aplicarse las normas que hagan cumplir dicha ley.
Según la directora la inseguridad es consecuencia de la falta de claridad entre las directrices señaladas por el ministerio de Salud y el ministerio de Economía, Industria y Comercio (MEIC).
Por su parte, Manuel Burgos, presidente de la Cámara Costarricense de Restaurantes y Afines, aseguró que quienes fuman dejaron de salir y ahora se quedan en la casa, lo que se refleja en una contracción en el sector gastronómico de 20% en negocios donde se sirve en mesa y del 10% en los que ofrecen comida rápida.
"Si hay una reducción en las ventas, al principio se decía que no tenía afectación pero ya se están perjudicando", recalcó Burgos.
A criterio de Vázquez, los comerciantes están desinformados sobre los alcances de la ley y los hace caer en errores que perjudican sus negocios, pese a que confiesa la Ley es clara.
"El problema es de inseguridad jurídica. Mientras el MEIC les exige tener datos de los productos, Salud les limita la promoción de los mismos", dijo Vázquez.
La directora comentó que en especial los comercios detallistas que tienen espacios reducidos han visto afectadas sus ventas al confundirse las directrices de ambos ministerios.
"Definitivamente la ley fue muy clara. En los exhibidores no se puede tener publicidad pero si pueden tener dispensadores y eso se confunde. Se pretende que el producto esté escondido. Esta es una ley restrictiva pero no es prohibitiva", comentó.