La competencia entre cafeterías no solo se presenta en el mercado doméstico sino que ya se manifiesta en el aeropuerto Juan Santamaría, donde la multinacional estadounidense Starbucks abre hoy martes al público su primer negocio.
De esa manera le planta competencia al Grupo Britt, quien dijo tener en operación tres establecimientos en la terminal aérea ubicada en Alajuela.
Las compañías ofrecen la bebida en los sitios y el café empacado para llevar.
Mónica Bianchini, gerente de Starbucks en Costa Rica, explicó que con la del Aeropuerto son ya 11 las tiendas de la empresa en Costa Rica.
Esa cantidad de establecimientos se disputa el mercado con los 54 que, según Pablo Vargas, CEO del Grupo Britt, ellos tienen en Costa Rica.
A eso se añade la presencia del colombiano Juan Valdez (la cantidad de negocios no se pudo conocer ayer) y la de muchos negocios especializados en la bebida.
Bianchini consideró ayer que el crecimiento de la compañía en Costa Rica superó las expectativas iniciales, mientras Vargas afirmó que todavía hay espacio para más crecimiento.
Por su parte, Édgar Rojas, subdirector ejecutivo del Instituto del Café de Costa Rica (Icafé), calificó de muy positiva la competencia, porque pone más en el radar el producto costarricense.
Mario Arroyo, gerente de Promoción del Icafé, explicó que por un lado las terminales aéreas son muy atractivas para los negocios de café, y por otro, se mantienen como una inversión atractiva en el mercado doméstico nacional.
Agregó que los empresarios de cafeterías no se deben inscribir en el Icafé, pero los informes generales indican que los establecimientos van en aumento.
Camile Ratón, propietaria de la cafetería Cafeoteca, ubicada en el interior del restaurante Kalú, en Barrio Escalante, San José, dijo que la oferta bastante diferenciada es el punto central.
Cafeoteca, agregó, ofrece café de los ocho regiones cafetaleras de Costa Rica definidas por el Icafé. Además, tiene baristas (especialistas en bebidas a base del café) y brinda diferentes modalidades de preparación según el gusto del cliente, explicó Ratón.
Agregó que en vista de esa especialización del negocio no considera tan fuerte la competencia de las cadenas de cafeterías locales o multinacionales.