El ministerio que hace las transferencias a otras entidades es el encargado de darles seguimiento y supervisar su aplicación, afirmó la Contraloría General de la República, ante una consulta de La Nación.
En el caso de las transferencias por ¢2.917 millones a la Corporación Hortícola Nacional, este trabajo le correspondía, entonces, al Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).
Así se desprende de una respuesta de la Contraloría, por medio de su oficina de prensa, ante una consulta para este caso específico.
La viceministra del MAG, Xinia Chaves, dijo que las actuales jerarcas del ministerio se preocuparon por las transferencias y se reunieron con los dirigentes de la Corporación que entregaron el mando en diciembre pasado.
Según la viceministra, los directivo afirmaron que los recursos provenientes del Presupuesto Nacional apenas alcanzaron para financiar la parte operativa, pues no contaban con ingresos propios.
Ella prefirió no adelantar si el MAG hará una indagación propia o esperará dos informes en marcha.
Por su parte, Fernando Barquero, horticultor afiliado a la Corporación, dijo que es cierto que hubo ingresos de recursos, pero que hasta ahora no ha sido posible documentar el uso de ellos.
“Estamos con sangre en el ojo; porque hubo tanto dinero, y no permeó nada en los agricultores”, enfatizó Barquero, esta semana.
Él lamentó que el sector hortícola se dejara torcer el brazo por los gobiernos, pues les ofrecieron recursos a cambio de que no hicieran más manifestaciones.
“No podemos decir absolutamente nada en contra de nadie, de malversaciones o de enriquecimiento; eso queremos dejarlo muy claro, no se está culpando a nadie”, dijo el agricultor.
Reveló que un grupo importante de exdirigentes se está reuniendo para analizar los problemas de los horticultores, entre ellos, el específico de la Corporación, pero se negó a dar más detalles.