San José, Paso Canoas
El bloqueo que realizaban 300 transportistas costarricenses en la frontera de Paso Canoas, los últimos cinco días, fue levantado hace unos minutos, tras llegar a un acuerdo con las autoridades panameñas.
Los primeros diez camiones que pasaron la frontera de Costa Rica a Panamá transportan 7.000 sacos de abono y van para un ingenio.
Según el representante de los transportistas, Juan Carlos Segura, están satisfechos con el compromiso adquirido por el Gobierno que garantiza que Panamá cumplirá con todos los convenios internacionales y que no volverán a ser abusivos con los cobros y los plazos para pagar las multas.
Los camioneros nacionales tomaron dicha medida de presión, el sábado pasado, aduciendo que el Servicio Nacional de Fronteras (Senafront) les viene aplicando prácticas abusivas, les confiscan las llaves de los vehículos y los obligan a regresar a Paso Canoas para que cancelen las multas, sin darle 30 días hábiles para pagar como establece la Ley.
El mediador por parte del Gobierno fue el viceministro de Comercio Exterior, Fernando Ocampo, quien dijo que tras una gran cantidad de gestiones lograron llegar a un acuerdo con las autoridades panameñas para solucionar el conflicto.
"Ahora lo que esperamos es que estas acciones no se vuelvan a repetir para garantizar el libre tránsito de mercancías entre los dos países", destacó.
El canciller, Enrique Castillo, aseguró que había hablado con su homólogo, Fernando Núñez Fábrega, en horas de la mañana y que el Gobierno de Panamá se había comprometió a respetar el tiempo establecido por ley para que los transportistas paguen las multas y presenten sus apelaciones (90 días).
Además, para que dejarán entrar los 29 camiones que estaban retenidos, por lo que, no existe ninguna razón para que se mantuviera cerrada la frontera.
La presidenta de la Cámara de Exportadores de Costa Rica, Mónica Segnini, se mostró satisfecha por el levantamiento del bloqueo, pero dijo que se requiere una solución integral y de largo plazo.
No adelantó un monto de pérdidas pero aseguró que algunas empresas que exportan producto fresco, congelado y refrigerado de Costa Rica a Panamá y viceversa, han tenido problemas con el despacho.
"Las medidas de presión generan cobro de estadía por parte del transportista responsable de entregar la carga, por ejemplo, en el caso de refrigerados, provoca un costo por el consumo de electricidad de la unidad de transporte", aseguró.
Martha Castillo, vicepresidenta Ejecutiva de la Cámara de Industrias de Costa Rica, mencionó que Panamá es un socio natural para Costa Rica y que al año se venden $581.7 millones, por lo que, las autoridades deberían de buscan una solución al conflicto definitiva y no a medias.
"El sector industrial exportador no se puede dar el lujo de verse afectado por conflictos de este tipo, los cuales tienen un impacto directo en la operación de las empresas", concluyó.