Estoy convencido que el banquero no maneja dinero, maneja información. Uno de los reportes más conocidos y útiles es lo que los economistas llamamos la balanza de pagos, un registro de las relaciones comerciales y financieras entre un país y el resto del mundo para un periodo, generalmente de un año.
En la balanza se registran los flujos de dinero provenientes de las exportaciones e importaciones de bienes y servicios, así como aquellos de carácter financiero. Está integrada por tres grandes subcuentas: la cuenta corriente de bienes y servicios; la cuenta de movimientos de capital y la cuenta de variación en el saldo de reservas monetarias internacionales del país.
En la primera cuenta se registra el intercambio comercial con el resto del mundo y, por tanto, a su vez, se muestra la balanza comercial (flujos de exportaciones e importaciones de bienes ); la balanza de servicios (flujos provenientes del turismo, transportes, centros de llamadas, centros de servicio compartido, etc. ), la balanza de rentas (por remuneraciones y rentas por inversiones, como dividendos o repatriación de utilidades) y la de transferencias y remesas al exterior.
Dependiendo si los flujos de bienes y servicios exportados al exterior son mayores o menores a las importaciones, se habla de un saldo superavitario o deficitario en la cuenta corriente. La cuenta de movimientos de capital, nos dice cómo fue que el país financió ese faltante de flujos netos de exportación, ya sea con movimientos de capital, o financieros del sector privado o del sector público. En el primer caso, lo normal es por medio de inversión extranjera directa en el país, así como movimientos por inversión en títulos valores locales o externos, públicos o privados.
Siendo un registro contable, no necesariamente la suma de los débitos y los créditos coinciden exactamente y, por esa razón, se estila introducir una cuarta cuenta dentro de la balanza de pagos llamada de errores y omisiones.
En esta cuenta de cierre se registran movimientos de capital no directamente identificados y hay quienes argumentan que si son saldos importantes, podría ser por ingresos netos de fondos de fuentes no deseadas, como narcotráfico, trata de blancas y otros ilícitos.
Finalmente, la balanza es tan relevante pues refleja la oferta y demanda de dólares provenientes de las exportaciones, importaciones de bienes y servicios, así como de los movimientos financieros normales o especulativos y de los rubros de origen no identificados; su análisis y comportamiento nos puede dar una luz del por qué una moneda de una país se está devaluando o apreciando.