Los segmentos de transporte, educación y salud son los que más presionan el crecimiento de la inflación interanual (de un mes respecto al mismo mes del año anterior), que a junio de este 2017 cumplió cinco meses consecutivos de aumentar su dinamismo.
Estos son los grupos que muestran el crecimiento más alto con un repunte de 4,65%, 3,84% y 3,65%, respectivamente. Además, por su importancia dentro del cálculo de la inflación, también son los que más influencia generan en el indicador.
La categoría de alimentos y bebidas no alcohólicas también provoca un efecto positivo en el cálculo, pero este grupo crece menos.
El índice de precios al consumidor (IPC) registró una variación interanual de 1,77% en junio, mientras hace un año obtuvo un decrecimiento de 0,88%.
A pesar de la tendencia al alza, el indicador se mantiene por debajo de la inflación meta del Banco Central (3%, con una desviación de un punto porcentual hacia arriba o abajo).
Las cifras del índice fueron publicadas esta viernes 7 de julio por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC), quien se encarga del cálculo.
El segmento de transporte crece impulsado por los combustibles para vehículo, que obtuvieron un repunte interanual de 15% en junio.
El precio de la gasolina súper pasó de ¢518 a ¢597, por litro, en el periodo comprendido entre junio 2016 y junio 2017. Este repunte está ligado a los precios internacionales de los hidrocarburos, que aunque llegan con rezago, alcanzaron entre abril y mayo casi los $50 por barril, según el economista Luis Mesalles.
Destaca que en marzo, abril y mayo la categoría de transporte mostró mayor dinamismo interanual que en junio. Es decir, aunque es la que más crece, repuntó menos en junio que en en los tres meses previos.
Por otra parte, en educación, la enseñanza formal es la que más presiona al alza en esta categoría. En salud, tanto los productos farmaceúticos y equipo terapeútico como los servicios médicos, paramédicos y hospitalarios reflejan mayor crecimiento.
Mesalles explicó que, por ahora, la inflación no es una preocupación para la billetera de los costarricenses, ya que aunque el ingreso real de los costarricenses ha perdido valor en un 1,77%, esta cifra sigue siendo baja.
Respecto al comportamiento que podría tener el indicador en lo que resta del año, y su regreso al rango meta del Banco Central, Mesalles explicó que "los precios internacionales de petróleo están ayudando para que eso tarde un tiempo mas en suceder. Por otro lado, el BCCR sigue manejando su política monetaria de manera tal que la inflación no debería subir muy rápido".
Por su lado, el economista Alberto Franco afirma que la presión inflacionaria se mantiene generalmente contenida y podría llegar al rango meta del Central en algún momento del segundo semestre de este 2017.