Importadores de autos buscarán en Hacienda solución a crisis

El lunes se reúnen con Ministro Ayales

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San José (Redacción). Unas 3.500 empresas, en su mayoría familiares, dedicadas a la importación de autos usados, afrontan una crisis debido a la variación del cálculo en el valor fiscal que se les aplica, razón por la cual el lunes en la mañana se reúnen con el ministro de Hacienda, Edgar Ayales.

José Carballo, presidente de la Cámara Costarricense Automotriz, afirmó que unos 4.000 autos que tenían en trámite para las ventas de esta época navideña sufrirán un cambio drástico en el pago de impuestos, por lo que su negocio deja de ser rentable.

Actualmente esos vehículos están en puertos, almacenes fiscales, subastas en Estados Unidos y en patios de empresas de flete marítimo, entre otros. Esos vehículos se compraron con las reglas anteriores y, según Carballo, de la noche a la mañana les cambian las reglas sin aviso alguno.

Afirmó que quedan en clara desventaja ya que los impuestos de importación de autos usados suben ¢700.000 en promedio, mientras que los autos nuevos no subirán.

Con esta variación en el valor fiscal se afecta además de los importadores a los talleres de carrocería y pintura, llanteros, tramitadores del registro de la propiedad, abogados, financieras, empresas de transporte y otros.

“Este sector es tan importante que representa el segundo recaudador de impuestos en aduana, solo superado por los combustibles”, indicó Carballo.

Sobre la reunión del lunes a las 9 a. m. con el ministro de Hacienda, esperan que prevalezca el diálogo. Explicarán que con acciones como las tomadas se les está poniendo el candado al dejarlos de forma improvisada sin posibilidades de seguir con el negocio. Critican que se empezó a cobrar sin ni siquiera haber salido publicado en La Gaceta.

Agregó que los clientes también les llaman para quejarse por el aumento en el precio del marchamo, lo que hace que muchos reconsideren la compra de un auto usado.

En cuanto a los traspasos de vehículos, relató que por cada millón de colones que se incremente el costo del carro, hay que pagar ¢38.000 colones más por ese rubro.

A manera de ejemplo citó que por un Toyota 2006, los impuestos se incrementan en ¢850.000 y el marchamo se le aumenta en ¢110.000.

Las empresas importadoras de carros usados cuentan actualmente unos 35.000 vehículos a la venta, pero son los que están en trámite los que se verán afectados con el cambio en las reglas, puntualizó Carballo.