El Gobierno mantiene su apuesta. Aunque la empresa CEFSA pronostica condiciones económicas difíciles en 1996, los jerarcas del equipo económico se aferran a sus propios números que prevén un panorama más boyante.
El primero en rebatir las cifras de Consejeros Económicos y Financieros (CEFSA) fue el ministro de Hacienda, Fernando Herrero, quien manifestó ayer en Casa Presidencial que tratarán de demostrar que la proyección de esa firma privada resultará equivocada.
Herrero recordó que al inicio del año anterior esa compañía previó que el Gobierno no alcanzaría las metas económicas programadas para ese período y que estas siempre fueron cumplidas.
La segunda vicepresidenta, Rebeca Grynspan, añadió que las proyecciones de CEFSA no son negativas y también reflejan, a su juicio, una mejor evolución económica que el año anterior.
La Nación publicó ayer proyecciones económicas de esa empresa privada que estiman la inflación acumulada para este año en un 15 por ciento, cinco puntos porcentuales más que la prevista por el Gobierno.
Mientras tanto, CEFSA aclaró que la cifra de déficit fiscal del 1,7 por ciento del producto interno bruto (PIB) dada en el documento sobre las perspectivas económicas de 1996 surge de las cifras de caja de la Tesorería Nacional.
Por tanto, asegura Félix Delgado, director de programas de CEFSA, debe ser ajustada para compararse con la meta de 0,5 por ciento del PIB. Con los ajustes, la estimación de 1,7 por ciento se situaría en 1,1 por ciento del PIB y esa es la cifra comparable con la meta gubernamental.
De igual forma, en 1995, el déficit de 4,1 por ciento del PIB baja a 3,5 por ciento al realizarse los ajustes, con lo cual se cumpliría la meta oficial.
Delgado indicó que en el análisis de CEFSA no se ve con pesimismo la evolución económica de 1996, se coincide con el Gobierno en una moderada recuperación de la producción y miran el año como un período de consolidación del ajuste iniciado en 1995.