Renegocian convenio con FMI

Gobierno no teme perder $80 millones del BID

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En vista de que la aprobación de nuevos impuestos no se daría en el primer semestre de este año, el Gobierno inició conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) para renegociar las metas del convenio.

Rodrigo Bolaños, presidente ejecutivo del Banco Central, manifestó que el instituto emisor ha discutido ciertos desvíos de las metas, sobre todo por una baja en las reservas internacionales. Sin embargo, dijo no poder referirse a las pláticas que se están produciendo con el FMI.

Pese a que se buscó al ministro de Hacienda, Fernando Herrero, en Consejo de Gobierno y por medio del teléfono, no fue posible hallarlo.

Además se trató de consultar a la segunda vicepresidenta y coordinadora del equipo económico, Rebeca Grynspan, pero en la oficina de prensa informaron que ese tema se trataría hoy en rueda de prensa.

Algunos economistas, como Eduardo Lizano, Francisco Gutiérrez y Ronulfo Jiménez, aseguran que es difícil cumplir con una reducción del déficit fiscal al 3,5 por ciento de la producción para diciembre, frente al 8 por ciento que se registró en 1994, como se ofreció al Fondo.

En la baja del déficit para este año, el país se comprometió a un aporte de dos puntos del lado del gasto -para eso hay un plan de reducción de ¢32 mil millones- y a otros dos puntos con nuevos ingresos por medio de impuestos.

La discusión sobre esos tributos se espera para agosto, en el próximo período de sesiones extraordinarias.

Según Bolaños, los dos requisitos más formales para que el convenio con el FMI -negociado a nivel técnico- sea aprobado por las altas autoridades de ese organismo, son el pago previo de unos $50 millones de $90 millones atrasados con Club de París y la aprobación de los impuestos.

Cuanto más se demore el cumplimiento de esos dos requisitos, la Carta de Intenciones negociada no será aprobada, lo que implicaría una desactualización de las metas y la necesidad de llegar a una renegociación, explicó.

Las conversaciones del Banco Central sobre las cifras monetarias obedecen, en parte, a que las reservas, según la metodología aplicada con el FMI, están por debajo de lo pactado.

No precisó lo convenido. En marzo, las reservas con ese método ascendían a $73 millones y con la metodología propia del Banco Central eran de $1.018 millones.

Bolaños expresó que no debe preocupar esa merma pues en la metodología del Fondo se restan los pasivos en dólares de corto plazo, los cuales, según su criterio y el método del Central, sí se mantienen en el sistema nacional.

Prestamo con BID

Antes de noviembre también se requiere que esté vigente el convenio con el FMI y aprobar un proyecto de justicia tributaria, ley que mejorará la recaudación. De esa forma se hará efectivo un préstamo con el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).

Este crédito, por $80 millones, acompañaba al Tercer Programa de Ajuste Estructural (PAE III) con el Banco Mundial.

Según Bolaños, esperan que para ese mes esté todo resuelto. La Carta de Intenciones ya está circulando en el FMI; según la vicepresidenta Grynspan, cuando este proceso concluya la darán a conocer.

Para el economista Ronulfo Jiménez, si no se llega a aprobar el convenio con el FMI se daría una mala señal para las decisiones de los agentes económicos, pues aumentaría la incertidumbre sobre el rumbo del país.