La Refinadora Costarricense de Petróleo (Recope) podrá endeudarse hasta por $225 millones, en el 2018, para comprar combustibles y garantizar el abastecimiento del mercado costarricense.
El Banco Central de Costa Rica (BCCR) avaló, el pasado 7 de mayo, que la empresa pública obtenga los recursos en créditos a corto plazo, con bancos extranjeros, para financiar las importaciones y garantizar una reserva de hidrocarburos por encima de los dos millones de barriles.
Del monto total, $200 millones son para líneas de crédito y $25 millones para garantías de cumplimiento y avales con proveedores.
Recope pidió la autorización de financiamiento externo para enfrentar la volatilidad en el mercado de hidrocarburos y por el aumento en el costo del barril del petróleo.
"Es una realidad que los altos precios del mercado internacional pueden llevar a un desequilibrio del flujo de caja mientras se realizan los ajustes de precios necesarios", detalló Édgar Gutiérrrez, gerente de Finanzas y Administración de la Refinadora.
En los últimos seis meses, el precio del petróleo, tipo WTI, pasó de $55,95, en la primera semana de diciembre anterior, a $71 este mes de mayo, uno de los valores más altos desde finales del 2014.
Gutiérrez recalcó que también hay condiciones impredecibles que influyen en el precio de los combustibles, como conflictos geopolíticos en zonas productoras.
El financiamiento externo permite a la entidad pública adquirir hidrocarburos anticipadamente y no esperar a que la Autoridad Reguladora de los Servicios Públicos (Aresep) apruebe un alza en tarifas para comprar hidrocarburos.
Además, es la forma en que la institución se asegura contar con un inventario de almacenamiento para garantizar la demanda nacional, detalló el jerarca de la empresa pública.
Al primer trimestre del año, la entidad tenía una factura pendiente de pago de ¢70.256 millones, es decir 110% más frente a los ¢33.436 millones al mismo periodo del 2017, muestran los estados financieros de la institución.
El Banco Central le enfatizó a Recope que las líneas de crédito deben usarse, de manera exclusiva, para financiar el pago de la factura petrolera y la apertura de cartas de crédito para importaciones.
Además, Recope debe informar cada trimestre sobre el monto de dinero utilizado y el saldo disponible de los financiamientos, según consta en el acta de la sesión 5826-2018.
Figura recurrente
Recurrir al endeudamiento externo para comprar combustible ha sido una figura recurrente por parte de la Refinadora.
Entre el 2011 y el 2013, obtuvo autorización para líneas de crédito a corto plazo por $680 millones.
En ese periodo, la institución pública enfrentó una serie de presiones financieras que la obligaron a recurrir, en reiteradas ocasiones, a endeudamiento con sus proveedores de hidrocarburos.
Entre el 2011 y el 2012, la Aresep obligó a la Refinadora a devolverles ¢63.000 millones a los consumidores mediante rebaja de combustibles.
Asimismo, entre el 2010 y el 2014, la entidad debió pagar ¢96.600 millones al fisco, tras una fiscalización hecha por Tributación de las declaraciones del impuesto sobre la renta hechas por Recope.
Entre el 2014 y el 2016, la institución pública recibió la autorización para endeudarse por $569 millones.
Opciones bancarias
Para el 2018, la institución hizo la solicitud de autorización de endeudamiento como medida preventiva ante cualquier desequilibrio que pueda darse por el incremento en los precios.
Gutiérrez informó de que, hasta el momento, no ha sido necesario usar una línea de crédito.
Por procedimiento, una vez que el BCCR aprueba el uso del endeudamiento externo, Recope tramita una autorización en el Ministerio de Hacienda.
La empresa estatal detalló que presentó esa solicitud de aprobación, la cual aún está en estudio.
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Entre los bancos a los cuales Recope puede acudir están BNP Paribas, Deutsche Bank AG, Davivienda, Scotiabank, Bladex y el Banco Internacional de Costa Rica (Bicsa).
"Las condiciones financieras con los bancos, como son líneas de crédito menores a un año, son de referencia; estas varían pues se definen propiamente en el momento de la necesidad", explicó Gutiérrez.
Añadió que la autorización del Banco Central no implica que debe usarse en su totalidad.
Si las líneas de crédito no se usan no hay ningún compromiso con bancos externos, ni obligaciones financieras, enfatizó el jerarca.
La empresa pública efectúa varias cotizaciones de crédito con varios bancos, previo a elegir el financiamiento.
En el caso de los avales, los proveedores de combustible de Recope –en su mayoría de Estados Unidos– los piden como garantía de cumplimiento por la compra de combustible.