Recaudación tributaria del Gobierno se desacelera en 2023

Ingresos por impuestos ascendieron al 11,1% de la producción hasta octubre de este año, en comparación con el 11,4% del mismo periodo en 2022, según Hacienda

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La recaudación tributaria del Gobierno Central muestra una desaceleración en el transcurso de este año. Entre enero y octubre pasados, los ingresos por impuestos representaron el 11,1% del producto interno bruto (PIB), totalizando ¢5.229.640 millones.

En contraste, durante el mismo periodo de 2022, los ingresos ascendieron al 11,4% del PIB de Costa Rica, alcanzando en términos absolutos ¢5.093.588 millones, según informó el Ministerio de Hacienda, en un comunicado de prensa, este jueves 23 de noviembre.

Los datos de Hacienda, en términos interanuales, indican que el crecimiento de la recaudación fue del 2,6% del año pasado a este. Sin embargo, en el 2022, este incremento porcentual fue del 15,6% en comparación con el 2021.

Hacienda destacó que los ingresos continúan reflejando una significativa desaceleración. Dicho resultado tuvo un efecto en el balance primario y el déficit fiscal del Poder Ejecutivo.

Para el economista Daniel Ortiz, la desaceleración en la recaudación tributaria tiene el efecto de varios factores. Uno es que las empresas más dinámicas de la economía, ubicadas en el régimen de zona franca, no pagan impuesto sobre la renta.

Las empresas del régimen definitivo, que sí tributan sobre sus ganancias, crecen a un ritmo más despacio, lo cual se refleja en una pérdida de su importancia relativa de cara al fisco, apuntó este especialista.

Ortiz también recordó el efecto de la baja en el precio del dólar, pues muchas empresas facturan en la moneda extranjera.

“Colonizar los ingresos de estas empresas a un tipo de cambio mucho menor los lleva a tener menores ingresos que hace un año, y por ende pagar menos renta”, manifestó Ortiz.

El impuesto sobre la renta representó el 39,2% de los ingresos por impuestos hasta octubre, es decir, ¢2.047.988 millones, mientras que el impuesto sobre el valor agregado (IVA) fue del 36,2%, con un monto de ¢1.894.952 millones.

En tanto que el impuesto a los combustibles fue el 9% de los ingresos. El restante 15,6% está compuesto por diversos tributos como el selectivo de consumo, el de importaciones, el de exportaciones y el de la propiedad de vehículos.

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Resultado integral

El menor ritmo en la evolución de la recaudación tributaria tiene un efecto en el resultado financiero del Gobierno.

El superávit primario (ingresos menos gastos, sin tomar en cuenta el pago en intereses) fue del 1,7% de la producción hasta octubre pasado, mientras que, en el mismo periodo del 2022, fue del 2,1% del PIB.

En tanto, el déficit fiscal del Gobierno ascendió a 2,4% del PIB, en los primeros 10 meses de este año, lo cual significó un aumento respecto al 1,8% del PIB, en el mismo lapso del 2022.

La presión en las finanzas públicas, según Hacienda, ocurrió por el pago de los intereses de la deuda cuyo rubro ascendió a ¢1.976.620 millones, hasta octubre pasado, equivalente al 4,2% del PIB.

El año pasado, el monto del pago para el mismo periodo fue de ¢1.818.536 millones, es decir, 4,1% de la producción.

El gasto corriente sin intereses cerró, a octubre pasado, en ¢4.588.607 millones lo que significó un crecimiento de 0,8% en relación con el mismo periodo del 2022, cuando ascendió a ¢4.554.072 millones.

Hacienda recalcó que el crecimiento del gasto reportado este año está por debajo del promedio registrado para el periodo 2007 y 2023, que fue del 10,2%.

Los rubros principales en los egresos corrientes son las remuneraciones, las transferencias, el pago de bienes y servicios; y la inversión en obra pública.

En cuanto al nivel de endeudamiento, Hacienda señaló que hasta octubre pasado, la deuda como porcentaje de la producción del país era equivalente al 59,8%. Mientras que, en el mismo periodo del 2022, era del 63% del PIB.

El resultado preliminar está por debajo del 61,8% de la producción de endeudamiento esperado para el cierre de este año. Sin embargo, en el mes de noviembre deberá reflejarse el efecto de la segunda colocación internacional por $1.500 millones.

Nogui Acosta, ministro de Hacienda, destacó que el resultado fiscal del país es bueno y se mantiene en la ruta de la mejora, principalmente, por la contención del gasto público.

“Las cifras fiscales y la percepción internacional sobre Costa Rica reflejan la confianza en la gestión de nuestra estrategia fiscal, misma que define con claridad los objetivos que se quieren alcanzar en materia de ingresos, gastos y gestión de la deuda”, apuntó el jerarca.