Por cada colón que ingresa a las arcas del Gobierno Central este gasta ¢1,75.
Así lo explicó este jueves Marjorie Morera, directora de Presupuesto Nacional, en la tercera mesa de Diálogo Nacional sobre el Plan de Consolidación Fiscal.
Según la funcionaria, la inflexibilidad de gastos del Gobierno es tan alta, por mandatos constitucionales y leyes específicas, que impide una reducción rápida de las erogaciones o una reasignación de los recursos.
Por destino, los gastos creados constitucionalmente equivalen a ¢0,60 de cada colón que recauda el Gobierno. Los desembolsos creados por ley equivalen a ¢0,36 y ¢0,51 se pagan por servicio de la deuda (intereses y amortizaciones).
Gastos inflexibles. Manrique Saenz, asesor del Ministerio de Hacienda, explicó que tras la caída en los ingresos por la crisis del 2008, el crecimiento de estos retomó un ritmo de crecimiento normal. No obstante, los gastos aumentaron de forma importante y estos no pueden recortarse fácilmente.
"Después del 2010 se estabilizaron los gastos, pero no es fácil retroceder, quedamos en una meseta que son gastos corrientes, difíciles de revertir", explicó Sáenz.
Esto se da pese a que el gasto en intereses, afirmó, ha estado bajo, debido al escenario internacional de tasas bajas. "Eso nos ha ayudado", agregó.
Entre las causas del aumento del gasto entre el 2007 y el 2012 se mencionó el aumento de salarios del Gobierno para evitar fugas al sector privado.
Esta decisión generó a su vez incrementos en pensiones que se indexan a los salarios y remuneraciones en otras entidades descentralizadas y autónomas del sector público.