Con el anuncio de la adquisición de BBVA Panamá por parte del colombiano Grupo Aval, el pasado viernes, BAC Credomatic Network, se perfila como uno de los conglomerados financieros más grandes de Centroamérica y Panamá, con activos que superan los $14.000 millones, más de 16.000 trabajadores y 389 sucursales. Al frente de esta operación está el costarricense Ernesto Castegnaro, quien el miércoles pasado dijo a La Nación que los grupos financieros suramericanos aún tienen la mira puesta en la región, y espera más adquisiciones de bancos.
En menos de un mes BAC Credomatic Network, propiedad de Grupo Aval de Colombia, consiguió que sus activos en la región centroamericana superaran los $14.000 millones, tras la compra del Banco Reformador de Guatemala, el 26 de junio, y del Banco Bilbao Vizcaya Argentaria de Panamá (BBVA Panamá) el viernes anterior, que luego se fusionara con el BAC Panamá.
El costarricense Ernesto Castegnaro, presidente de BAC en la región, conversó con La Nación el miércoles pasado, dos días antes de la más reciente adquisición del Grupo. Ahí habló sobre el proceso de crecimiento de la entidad en Centroamérica, y reconoció que las empresas financieras suramericanas aún tienen un alto interés en el Istmo.
¿Cuál es la ventaja de operar en el ámbito regional?
En Centroamérica, los sistemas nuestros están totalmente integrados. Un cliente, principalmente corporativo, que tiene operación regional, puede hacer transacciones en los otros países centralizadamente, como pagar la nómina y manejar la tesorería. Eso le permite a una operación regional ser más eficiente en lo que tiene que ver con la parte de costos operativos.
”En Guatemala era más limitado el servicio, porque no teníamos una presencia tan grande, pero eso cambió con la compra del Banco Reformador”.
¿Qué tipo de operaciones pueden hacer los clientes?
Todo lo que puede hacer un cliente aquí en Costa Rica (desde el sitio web) lo puede hacer a nivel regional. Es igualito. Usted entra a la sucursal electrónica y quiere transferir dinero a su cuenta en Guatemala, le da la instrucción y donde le da enter inmediatamente está hecha la transferencia en el otro lado.
¿Pasará lo mismo entre Centroamérica y Colombia?
De momento, la información está integrada para consulta de saldos. No va a ser tan fluido y automático como el centroamericano porque hay que seguir un procedimiento ante el ente supervisor en Colombia, en el movimiento del dinero. La idea es que el proceso sea a través de la computadora.
¿Cuántos clientes corporativos regionales tienen?
Hay de todo un poco. Preferiría no dar números. Principalmente, cuando uno ve saldos está más relacionado con empresas.
¿Cuál es el potencial de Centroamérica?
Cuando el enfoque es regional, se pasa de pensar en un mercado de 4,5 millones de personas a otro de 45 millones. Si incluimos Colombia llega a 90 millones. De alguna forma facilitamos ese proceso de ampliación, a través de los sistemas de pago, de facilidades de crédito y manejo del dinero entre países.
¿Se frenó la llegada de grupos financieros suramericanos?
No me atrevo a decir que ya se frenó; creo que puede haber transacciones nuevas. De hecho, me sorprendería que no las hubiera. Deberíamos esperar que haya más transacciones, incluso nosotros mismos. Creo que otros bancos harán inversiones en la región.
¿Por qué invierte Grupo Aval tanto en la región?
Ellos creen en la región y creo que tienen razón. La región irá resolviendo sus problemas, que dan tropezones a veces. A la larga el tema de inversión en actividades productivas, que generen empleo y riqueza, hace que vuelva a haber reinversión y esa es la base de los procesos de desarrollo.
¿Cuál es el peso de Costa Rica en BAC Credomatic?
Es 30%. No se puede medir mucho por población. Lo que hacemos es ver el producto interno de cada país y cómo andan los activos nuestros en el pastel centroamericano.
¿Son el banco más musculoso en Centroamérica?
No me hace mucha gracia hablar de eso. Los clientes regionales están contentos.