Empresa anuncia cierre de la planta de Levi’s

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

La planta de la firma Centro Industrial Manufacturero El Roble (Cimer), maquiladora de las marcas Levi’s y Dockers, cerrará paulatinamente en los próximos dos meses, anunció la compañía.

El cierre de la empresa en el país, tras 36 años de estar aquí, dejará sin empleo a 230 personas.

La planta de Cimer se encuentra en el Parque Industrial Cartago.

Cimer anunció que mantendrá una operación solamente comercial (de distribución) en Costa Rica, para lo cual se dejará alrededor de otros 130 empleados.

En una nota publicada en un campo pagado, la empresa dijo: “En el contexto actual de los negocios, donde la competencia, la tecnología y el mercado imponen cada vez más presión sobre la productividad y eficiencia de las organizaciones, se hace inevitable que las empresas cambien, ya sea para reaccionar frente a los cambios en el entorno o para introducir nuevas estrategias de negocio”.

Cimer decidió migrar de un modelo de producción a otro de importaciones de producto terminado, dice el comunicado.

Miguel Schyfter, presidente de la Asociación Nacional de Exportadores de la Industria Textil (Aneit), aseveró que la firma cumplirá con todas sus obligaciones legales y, además, dará algunos beneficios.

A cada empleado se le entregará un mes adicional de salario y un bono de ¢25.000 para comprar en la planta.

Este cierre se da en un contexto de caída de la producción textil en Costa Rica, que viene desde hace varios años. El sector exportaba $729 millones en el 2000 y sus ventas cayeron hasta $234 millones en el 2009, debido a la competencia por menores costos de otros países.