San José
Una persona que llegue a realizar teletrabajo dos días a la semana, dejaría de emitir 0,8 toneladas de dióxido de carbono al año y obtendría un ahorro económico de aproximadamente ¢627.500 anuales.
Así lo señala la publicación "El teletrabajo en Costa Rica", elaborado por la consultora Ernst & Young S.A, y que detalló las relaciones entre esta modalidad de trabajo con tres aspectos: medio ambiente, ahorro económico y calidad de vida.
La información fue recopilada mediante la aplicación de un cuestionario a 70 trabajadores y 14 empleadores de instituciones públicas y privadas del país, ubicadas en el Gran Área Metropolitana (GAM).
Según el documento, el colaborador se ahorraría además, 2,5 horas de su tiempo al día y evitaría el recorrido de aproximadamente 12,5 Kilómetros diarios en desplazamiento.
El estudio de EY demuestra que, en el sector público, solamente un 4,5% de los empleados actualmente hacen teletrabrajo, contra un 19% que sí realiza esta práctica en el sector privado. En este último, las jefaturas aplican rangos desde un día hasta un máximo de tres días por semana para la realización de trabajo vía remota.
A modo de ejemplo, la firma hace referencia que para 2010, Estados Unidos alcanzó un 20% de teletrabajadores y la Unión Europea llegó a tener un 6% de su fuerza laboral bajo ese principio; unos 10 millones de empleados.
"Un 85% de las personas encuestadas indican no tener problemas de conectividad para poder implementar la modalidad de telebrajo en el GAM o fuera de ella. Sumado a esto, un 80% de las personas percibe el treletrabajo como un beneficio y considera (86%) que impacta su vida de forma positiva", se lee en el documento.
Pros y contras. Ante las problemáticas actuales de transporte, medio ambiente y calidad de vida, que enfrenta el país, la implementación de esta modalidad podría representar beneficios importantes, indica el estudio.
Entre las ventajas para los trabajadores, el informe señala como las principales una reducción en el gasto de traslados y combustible, incremento de la eficiencia, reducción del estrés laboral y una mayor independencia.
Para los empleadores, los beneficios se traducirían en: aumento de la productividad, reducción de costos fijos y hasta retención del talento humano.
Por el contrario, las desventajas que traería el teletrabajo para los empleados son una reducción de las interacciones laborales y una posible reducción de las normas de seguridad ocupacional. Para la empresa, los puntos negativos recaerían en las dificultades para los procesos de supervisión y control, así como la dificultad de hacer esta práctica una generalidad entre todos sus colabodores.
Objetivo país. La firma señala que Costa Rica cuenta con un buen escenario para la implementación del teletrabajo, pues el avance en las tecnologías de la información y comunicación,así como los indicadores de conectividad del país son positivos.
A su vez, si el país logrará proponerse la meta de lograr un incremento porcentuajal de 1,25% por año, se podría alcanzar un 32% de penetración de telebrajo en Costa Rica para el año 2030.