Costo de la vivienda tendrá un fuerte aumento con plan fiscal

Sube por 14% del IVA a servicios; además, se duplica carga al traspaso

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Quienes están en proceso de construir una vivienda, o pedir un crédito para comprar una hecha, mejor que se apuren o se preparen para un eventual incremento en los costos en caso de que se apruebe el proyecto de Ley de Solidaridad Tributaria.

Según un ejercicio que realizó la Cámara de la Construcción, una casa que actualmente sale en unos ¢48,6 millones (incluida la edificación y los costos de formalización del crédito) puede llegar a subir a ¢52,5 millones, si el dueño decide hacer directamente la obra.

O, bien, el costo puede ascender a los ¢54,7 millones si contrata a un maestro de obras o una empresa para hacerla.

¿Cómo afecta? El proyecto de ley afecta el costo de construcción y de formalización del crédito para vivienda por varias vías.

Una de ellas es que transforma el impuesto de ventas en un impuesto al valor agregado, lo extiende a todos los servicios y lo eleva del 13% al 14%. Eso significa que se deberá pagar un 14% sobre el costo de todos los servicios de construcción; por ejemplo, sobre el costo del subcontrato o fletes, entre otros.

Este efecto provocará un incremento en el costo original de la obra, y, como sobre ese costo se calculan los gastos del crédito, como honorarios, traspaso y timbres, entre otros, se elevan todos los costos del crédito.

Pero los costos del crédito también crecen por la aplicación del 14% del IVA sobre los servicios de los abogados y peritos.

Aparte de ello, el impuesto mismo de traspaso se duplica al pasar del 1,5% al 3% para casas que tengan un valor superior a 160 salarios base, que en la actualidad son aproximadamente ¢50 millones.

Guillermo Bonilla, gerente general de la empresa Fomento Urbano, firma cuyo público meta es la clase media, comentó que la casa más barata que ellos ofrecen actualmente es de $100.000, poco más de ¢50 millones.

Al incrementar los costos, las familias necesitarán solicitar créditos más altos, enfrentar cuotas más altas y, por lo tanto, tener ingresos más altos para acceder a esos préstamos.

Por ejemplo, en el Banco de Costa Rica por un préstamo por ¢48,6 millones, a 30 años plazo y con un tasa de interés del 8,75% el primer año, el ingreso mínimo requerido es de ¢ 1.471.828 y la cuota sin pólizas le queda en ¢386.594.

Pero si el monto sube a ¢52,5 millones, el ingreso mínimo se eleva a ¢1.592.524 y la cuota a ¢418.296, mientras por ¢54,7 millones a ¢1.657.000 y la cuota a ¢435.000.

Según un estudio de la Fundación Promotora de la Vivienda, de agosto del 2011, en el 2010 175.423. hogares carecían de vivienda digna en nuestro país.