Caída de ingresos en Fanal atiza crisis en Consejo de Producción

Administración urge medidas para revertir fuerte bajade 50% en ventas

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Un déficit proyectado de ¢1.300 millones para este año en la Fábrica Nacional de Licores (Fanal) atiza la crisis financiera del Consejo Nacional de Producción (CNP), cuya principal fuente de recursos es la primera.

El problema financiero de la Fanal se presenta por una caída del 50% de sus ventas en lo que va del año, con respecto a igual período del 2009, reconoció ayer su administrador Jorge Orozco.

Las dificultades financieras de Fanal se conocieron ayer, en medio de una protesta de los empleados de esa fábrica frente a las instalaciones del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG).

Los empleados de Fanal pidieron la destitución del gerente del CNP, Ricardo Zúñiga. Cuestionan algunas de sus decisiones relacionadas con el sistema de distribución de los licores de la firma.

Fanal es una entidad adscrita al CNP, pero no tiene su propia personería jurídica. Por tanto, todas las decisiones deben pasar por la aprobación de la gerencia del CNP.

La ley también exige a Fanal trasladar parte de sus ganancias para financiar el CNP. Las transferencias el año pasado oscilaban entre ¢200 millones y ¢250 millones mensuales, y este año ya se redujeron a entre ¢100 millones y ¢120 millones mensuales, detalló ayer la empresa.

“Urgen medidas para revertir la situación; de seguir así, Fanal pronto dejaría de hacer transferencias al CNP”, advirtió Orozco.

Crisis. Mientras, la crisis presupuestaria del CNP parece ser más fuerte este año, pues ayer los empleados de Fanal denunciaron que tanto aquella entidad como la Fábrica no han pagado el aumento salarial vigente desde enero.

Entre los empleados del Consejo circuló la versión de que ya hubo dificultades para pagar la planilla de la quincena pasada.

El CNP no cuenta con recursos específicos destinados del presupuesto nacional. Su principal fuentes es la Fanal y en numerosos momentos de crisis de años anteriores debió acudir al Ministerio de Hacienda para pedir transferencias.

Extraoficialmente se conoció ayer que acumula un déficit superior a los ¢3.000 millones este año.

Además, en lo que va de este Gobierno no se ha realizado ni una reunión de junta directiva del Consejo. Se dice que no hay quórum porque su presidente ejecutivo, Román Solera, está incapacitado y no puede asistir a las reuniones.

Desde inicios de este mes La Nación pidió, sin éxito, una cita con autoridades del CNP o con la ministra de Agricultura y Ganadería, Gloria Abraham, para consultar acerca de los problemas y el futuro del CNP. Abraham es la jerarca de las entidades agropecuarias, entre ellas el Consejo.

¿Cómo se cubrirá el déficit del CNP, un viejo problema agudizado ahora con menos recursos de la Fanal? ¿Se mantiene en este Gobierno la tesis de unirlo con el Programa Integral de Mercadeo Agropecuario (PIMA)? ¿Se puede vender parte de los activos del CNP? ¿Debe desaparecer, como creen muchos? Estas son algunas preguntas pendientes.