Bridgestone tiene una meta clara para el 2020: lograr reducir en un 25% sus emisiones de dióxido de carbono en comparación con sus niveles del 2005.
Se trata de una directriz que viene desde el más alto nivel corporativo global. En Costa Rica, hay claridad sobre el peso de esta responsabilidad.
Así lo expresó Sylvia Alfaro, gerente regional de Medio Ambiente de Bridgestone, quien aseguró que el compromiso es extensivo a los más de 1.000 empleados de la firma, que recién renovó su certificación ISO 14001.
Los primeros pasos hacia este compromiso comenzaron en el 2007 y ya hay acciones concretas, aseguran en la empresa: envían al botadero solo el 12% de sus residuos, en vez del 80% de años atrás.
La compañía también colocó lámparas de bajo consumo energético y aires acondicionados con refrigerantes menos nocivos para el ambiente.