El plan de asistencia con productos para los agricultores y ganaderos afectados por las inundaciones en el Caribe, se concretaría en enero del 2016, según estimaciones oficiales.
Esa ayuda se financiará con ¢4.983 millones que se giraron a la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), la que, a su vez, los invertirá con base en los planes que le presente el MAG.
Felipe Arguedas, director nacional de Extensión Agropecuaria del MAG, explicó que la asistencia será en insumos, destinados a la rehabilitación de las plantaciones, y no habrá aportes de dinero.
Comentó que las oficinas del MAG, en las zonas afectadas, comenzarán a formular los planes de inversión. Estas propuestas estarían listas a inicios de noviembre para entregarlas a la CNE, la cual tiene unas tres semanas para analizarlas.
Para Arguedas, será en diciembre cuando se saquen las licitaciones para comprar los productos, según los planes de inversión hechos por el MAG.
Así que la entrega de los insumos a los productores no se producirá antes de enero, estimó Arguedas, basado en los tiempos que se emplearon para dar ayuda a los agricultores de Guanacaste, donde se declaró emergencia por sequía en setiembre del 2014.
Arguedas informó de que todos los planes de ayuda a los productores del Caribe se basarán en el informe de pérdidas, elaborado por los funcionarios del MAG. Añadió que los recursos nunca son suficientes para atender una emergencia, pero que la suma presupuestada al menos hará posible la rehabilitación de las fincas.
Manifestó que el MAG puso a disposición de los agricultores afectados la entrega de certificados por las pérdidas.
Ese documento es un requisito para que soliciten préstamos en el Banco Nacional, mediante un programa especial, a tasa preferencial, agregó el funcionario.
Mientras llega la ayuda, dijo, se reforzará la asistencia técnica en las zonas afectadas.