El índice mensual de actividad económica (IMAE) cumplió, en junio anterior, dos meses consecutivos de aceleración informó ayer el Banco Central.
El indicador tuvo, a esa fecha, un crecimiento interanual de un 2,7%, frente a junio del 2012.
La industria de manufactura, así como los servicios de intermediación financiera, fueron dos de los sectores que aportaron mayor peso a la economía.
“Hay una aceleración en el ritmo de crecimiento. En este caso, la reversión se explica por el dinamismo en la industria manufacturera, así como por la intermediación financiera, el comercio y la actividad inmobiliaria”, explicó Elvia Campos, encargada de elaborar el indicador en el Banco Central.
La mejora ocurre tras un periodo de 14 meses –entre marzo del 2012 y abril de este año– en que el indicador presentó un proceso de desaceleración.
Dispar. La industria de manufactura, instalada en zona franca, fue la que reportó un avance en junio anterior, pues mantuvo un ritmo estable en sus exportaciones de $3.500 millones a ese mes, según los datos oficiales de la Promotora de Comercio Exterior (Procomer).
Diferente es el comportamiento de la industria local, que aún sigue desacelerada, principalmente, por la baja en la actividad de la de producción textil, de cartón, químicos y metales, concluye la información del ente emisor.
“El crecimiento de las exportaciones de las empresas de zona franca tiene un mejor ritmo que el de las nacionales. El tope al crecimiento del crédito tuvo un efecto negativo en la demanda de productos de fabricación local”, dijo Juan Ramón Rivera, presidente de la Cámara de Industrias.
Por otra parte, la agricultura es el único sector productivo que aún reporta variación interanual negativa, pues a junio anterior cerró en un -1,44%.
El índicador de esta actividad tiene 10 meses consecutivo de desaceleración, de los cuales, en los últimos cuatro, ha decrecido.
“Varios factores incidieron en la baja del sector: climáticos, competitividad y una baja en las exportaciones. El café, por ejemplo, tuvo un duro golpe este año por la baja de los precios internacionales y el efecto en la producción por el hongo de la roya”, destacó Rigoberto Vega, vicepresidente de la Cámara Nacional de Agricultura.
El deterioro de este sector coincidió con una caída de un 7% en las ventas externas hasta junio anterior, frente al mismo periodo del 2012, según Procomer.