UNA inaugura un novedoso laboratorio de terapia celular

Está ubicado en la Escuela de Medicina Veterinaria, en Barreal de Heredia

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La regeneración de tejidos en animales podrá realizarse en el país gracias a la nueva Unidad de Terapia Celular que inauguró ayer la Universidad Nacional (UNA).

Este laboratorio se encuentra en la Escuela de Medicina Veterinaria de la UNA y es el primero que se establece en Centroamérica.

La unidad permitirá desarrollar terapias y protocolos para atender lesiones en tendones, ligamentos, articulaciones, fracturas y úlceras. Así, los primeros que se verán beneficiados serán los caballos que participan en competencias.

“Hay caballos dedicados a salto que, al igual que sucede con los futbolistas u otros deportistas, sufren de lesiones y tienen un índice de reincidencia del 80% que puede acabar con su carrera.

”En cambio, la terapia con células madre ayuda a prolongar las expectativas deportivas del caballo por muchos años”, comentó el médico veterinario Juan Manuel Estrada.

De esta forma, los investigadores podrán regenerar tejidos ya sea por células madre o plaquetas.

“Lo que nos interesa es mejorar la calidad de vida del paciente; por ahora es animal, pero mucho se puede extrapolar a medicina humana”, manifestó Manuel Estrada, quien es coordinador de la Unidad de Terapia Celular.

Tecnología de punta. El nuevo espacio tiene un área de 400 metros cuadrados, que incluye los quirófanos y el laboratorio.

En cuanto al laboratorio, este consta de dos salas. La primera está dedicada al diagnóstico por imágenes de última generación, e incluye tanto equipo de ultrasonido como de radiografía digital.

La segunda se conoce como sala de aislamiento, donde se trabaja con las células madre y las plaquetas con el fin de cultivarlas, expandirlas y congelarlas para poder aplicarlas en tratamiento de medicina regenerativa.

Para ello se dispone de una cámara de flujo laminar, un incubador de dióxido de carbono (CO2), un microscopio invertido de luz y centrífugas, entre otros equipos que están por llegar.

La Unidad de Terapia Celular fue financiada por la UNA, el Consejo Nacional de Rectores (Conare) y la empresa privada.