Trastornos alimentarios podrían gestarse desde la escuela primaria

Anorexia, bulimia y obesidad también podrían estar relacionados con otros problemas mentales

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

La obesión por un cuerpo delgado o musculoso podrían comenzar antes de que llegue la pubertad. Esto también podría estar ligado a otros problemas mentales.

Esas son los resultados de una investigación de médicos, nutricionistas, psicólogos y psiquiatras canadienses –de la Universidad de Montreal– presentado en la reunión anual de la Asociación de Trastornos Alimentarios de Canadá.

Los científicos estudiaron a 215 menores entre los ocho y los 12 años que ya tenían un diagnóstico de problema alimentario. Más del 15% se provocaban vómitos de forma ocasional, y el 13% no solo vomitaban o se purgaban si no que también tenían atracones de comida en donde ingerían grandes cantidades de alimentos (bulimia). El 52% de ellos ya había sido hospitalizado por problemas de alimentación y el 48% había sido atendido de forma ambulatoria en un centro médico.

"Muchos investigadores creen que la bulimia no aparece hasta la adolescencia, pero nuestros hallazgos indican que el problema puede presentarse mucho antes. Es posible que se diagnostique mucho menos debido a la falta de conciencia sobre el tema", manifestó, en un comunicado de prensa, Dominique Meilleur, coordinadora del estudio.

Problemas mentales. El asunto va más allá de no comer o de comer en exceso y luego vomitar. El 23% de los menores recibió burlas por su peso o apariencia física; pero más aún, en el 36% de las familias de los menores habían trastornos psquiátricos y algunos menores ya presentaban problemas de depresión o ansiedad.