Ticos se ejercitan más y comen mejor, pero están lejos del ideal

Sedentarismo pasó de 51% a 45% en 5 años; ingesta de fruta, de 22% a 34%

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Comer cinco porciones de frutas y verduras todos los días, hacer al menos 150 minutos de actividad física a la semana, no fumar, tener un consumo moderado de licor y reducir la ingesta de sal y de grasas saturadas.

Tras años de promover estos “consejos de oro” de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya aparecen algunos frutos entre los costarricenses. Empero, aún estamos lejos del ideal en salud.

La segunda Encuesta de Factores de Riesgo Cardiovascular de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) mostró que, en comparación con el primer estudio, realizado en el 2010 , los nacionales comen más frutas y verduras, hacen más ejercicio y fuman menos y su ingesta de licor es un poco menor.

Por ejemplo, la cantidad de personas que consume cinco porciones de frutas y verduras a diario subió de 22,3% a 33,9%, el sedentarismo o inactividad física bajó de 50,9% a 44,6%, y el fumado, de un 14,2% a un 13,3%. Asimismo, el consumo excesivo de licor descendió de 39,2% a 34,8%.

No obstante, todavía se está lejos de lograr valores ideales, pues se supone que toda la población debería ejercitarse, consumir frutas y verduras, no fumar y tomar alcohol moderadamente. La OMS considera que un país es exitoso en sus hábitos de vida saludable cuando el consumo de frutas y verduras es del 80% o más, y el sedentarismo, de 20% o menos.

“Es importante no bajar la guardia. Todavía hay mucho que trabajar. Busque hacer algo de actividad física, quite el salero de la mesa, coma más frutas y verduras, cocine con poca grasa y evite el estrés”, manifestó el epidemiólogo Roy Wong, quien coordinó la investigación.

María del Rocío Sáenz, presidenta ejecutiva de la CCSS, añade: “Ahora que es época de propósitos, propóngase mejorar su salud. Póngase metas concretas con la actividad física.

”Es mejor comenzar con 15 minutos al día e ir aumentando poco a poco, que correr una hora el lunes y que el resto de la semana solo diga que le duele todo o que está muy cansado para seguir”.

[[BEGIN:INLINEREF

]][[END:INLINEREF]]

Impacto. La mejoría en estos números aún no impacta los índices de males crónicos como sobrepeso, obesidad, hipertensión, colesterol alto o diabetes.

“La gente que hoy tiene sobrepeso, hipertensión o diabetes, es el resultado de lo que hizo hace cinco o diez años. En términos de salud pública, lo que cuidamos hoy no va a tener efectos sino hasta dentro de unos cinco años después”, explicó Wong.

Es por ello que la diabetes subió de 10,8% a 12,8%; la hipertensión se mantuvo en 31%; los niveles de colesterol anormales pasaron de 12,6% a 13,7%, y los triglicéridos, de 44,8% a 45,8%.

Además, el sobrepeso aumentó ligeramente de 36,1% a 36,8% y la obesidad tuvo un salto un poco mayor: de 23% a 29,4%.

Esta información es de gran importancia, pues tales enfermedades suben el riesgo de males cardiovasculares como infartos y derrames cerebrales, que son la principal causa de muerte en Costa Rica desde 1971 y figuran entre los mayores causantes de discapacidad.

“Debemos tomar conciencia de que somos los principales responsables de nuestra salud. Hay políticas públicas que ayudan, como la ley antitabaco, que es posible que tenga cierto peso en que el tabaquismo no suba, pero el llamado a mejorar los hábitos de salud es uno mismo”, dijo Wong.

Esta encuesta se hace cada lustro. Todos los datos obtenidos sirven para mejorar las políticas públicas de salud, y ver hacia dónde debe educarse más a la población y cómo diseñar las campañas ideales de prevención, así como definir los tratamientos.

¿Qué sigue? Los investigadores ya trabajan en un análisis más detallado según grupos de edad y zona geográfica. Este nuevo documento estaría listo a finales de enero próximo.