"Hace un rato nos hicieron un ultrasonido. Y fue algo lindísimo. Porque vimos que no comparten el cerebelo, eso es algo que se temía y lo hubiera hecho todo más difícil, pero no. Es algo tan bonito. Mi esposa casi llora, unos amigos en un grupo de whatsapp están muy emocionados, yo casi lloro también. Es una muy buena noticia".
Así, Stallin Núñez, padre de Samuel y Ezequiel, los siameses de San Vito que vienen unidos por la cabeza, describió el ultrasonido realizado la mañana de este martes a su esposa y que hace que su pronóstico sea más favorable.
El cerebelo es la estructura cerebral que controla la parte motriz y los impulsos del cuerpo. Ahora deben realizarse más pruebas para determinar si los bebés pueden ser separados.
"Sabemos que esto no es fácil. A ella la internan hoy y va a pasar unos días aquí en el hospital (Calderón Guardia). Hoy o mañana a más tardar le hacen una resonancia magnética. La ventaja es que ya va a estar de regreso en casa para celebrar el cumpleaños de nuestro hijo Jose Francisco", comentó el joven.
Samuel y Ezequiel están en su semana 27 de gestación (un embarazo a término tiene 40 semanas). Núñez asegura que su esposa está bien y que el apoyo de los médicos ha sido total. Para estar más cerca de la atención médica, la pareja ahora está viviendo en Guadalupe.
"Hemos tenido el apoyo de muchísima gente. La verdad es que uno a veces se queja de la Caja (Costarricense de Seguro Social) porque tiene que hacer filas, sin embargo, la atención que estamos recibiendo es buenísima. También es lindo ver todo el apoyo del pueblo de Costa Rica que nos está ayudando", señaló el vecino de Coto Brus.
De los otros tres casos de siameses en gestación (dos en el Calderón Guardia y uno en el San Juan de Dios) no se tienen más datos. Costa Rica está a la espera de los casos 10, 11, 12 y 13 de siameses que Costa Rica registra desde 1977 –cuando se dio el primer caso en La Cruz, Guanacaste–. De ellos, solo Yurelia y Fiorella Rocha Arias, de diez años, siguen con vida.