OMS insta a hacer cesáreas solo en caso de emergencia

Advierte de que pueden provocar complicaciones y discapacidades

Este artículo es exclusivo para suscriptores (3)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Ingrese a su cuenta para continuar disfrutando de nuestro contenido


Este artículo es exclusivo para suscriptores (2)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

Este artículo es exclusivo para suscriptores (1)

Suscríbase para disfrutar de forma ilimitada de contenido exclusivo y confiable.

Subscribe

¿Puede una madre escoger si tiene a su hijo por parto vaginal o por cesárea? Aunque muchas mujeres y ginecólogos apoyan esta idea, la Organización Mundial de la Salud (OMS) está preocupada ante un creciente número de cesáreas en el mundo, e insta a practicarlas solo cuando sea estrictamente necesario.

La OMS envió un pronunciamiento en que recuerda que lo ideal es mantener una tasa de cesáreas entre el 10% y el 15% de todos los nacimientos.

El documento aclara que las cesáreas sí son eficaces para salvar la vida de la madre y del bebé o para evitar enfermedades o complicaciones, pero esos casos no son tan frecuentes.

No obstante, el reporte dicta que “tasas de cesárea superiores al 10% no están asociadas con reducción en tasas de mortalidad materna y neonatal.

”Las cesáreas pueden provocar complicaciones y discapacidades, a veces permanentes o incluso la muerte, especialmente en lugares que carecen de instalaciones o capacidad para cirugías seguras y tratar complicaciones”, dice el informe.

A esto se une una investigación del 2009 que afirma que las cesáreas planificadas antes de la fecha de parto suben el riesgo de muerte de un niño a 2,1 por cada 1.000. Estos bebés también tienen más complicaciones respiratorias.

¿Cuándo hacerlas? La OMS y ginecólogos consultados por La Nación señalan que hay casos en los que la cirugía es el único camino. Por ejemplo, cuando esté en riesgo la vida de la madre o del hijo, si hay virus de inmunodeficiencia humana (VIH), embarazo de más de tres hijos, pelvis estrecha, o la posición del bebé obstaculiza la labor de parto.

También en mujeres obesas, hipertensas, diabéticas o sobrevivientes de cáncer, la situación es variable; cada caso se analiza por aparte y se decide.

Pero cada vez son más las mujeres sanas que optan por esta técnica, ya sea para evitar dolores de parto, no sufrir desgarros vaginales o razones personales.

“El parto natural es lo ideal siempre y cuando se den todas las condiciones, pero no puede satanizarse una u otra forma de tener al bebé”, indicó Ronny Calderón, ginecólogo de la Clínica Bíblica.

“El nacimiento de un bebé debe ser gratificante para la mujer. Si ella no está preparada para un parto vaginal, quiere cesárea y se le obliga a un parto, podría ser traumático. Lo mismo pasa al revés, con quienes sueñan con un parto vaginal y deben tener una cesárea de emergencia por una u otra razón”, agregó.

En el país. La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) –cuyos centros ven el 94% de los partos– sí tiene como política hacer cesáreas solo en casos calificados.

Datos de la institución señalan que, entre 1997 y el primer semestre del 2013 (cifras más recientes), el 9,64% de los nacimientos fue por cesárea. Por centros médicos, el que más cirugías de ese tipo realiza es el Hospital de la Mujer (15,98%), y el que menos es el de Coto Brus (1,03%).

Según dijo Sandra Vargas, quien es jefa de Gineco-Obstetricia del Hospital México, las cesáreas sí deben realizarse cuando así lo amerite, porque ayudan a aminorar el riesgo tanto de la mamá como del bebé, pero esto no es imprescindible en cada caso.

El promedio nacional de cesáreas oscila entre el 21% y el 22% pues en los centros privados la mujer tiene la opción de elegir cómo tendrá al bebé.

Según el ginecólogo de la Clínica Católica Jorge Gilberto Soto, esta tasa es menor que la de China (60%), Brasil (50%), México (48%) o Estados Unidos (31%).

Para Soto, la mejor forma de traer un hijo al mundo es por vía vaginal, pero todo el embarazo debe monitorearse por si se diera alguna complicación que motive una cesárea.

“La cesárea sigue siendo una cirugía con los riesgos propios de cualquier cirugía; lo ideal es restringirla. Si una mujer sana me dice que prefiere cesárea y no la necesita, trataría de convencerla de que lo mejor, si no hay cambios en su embarazo, es la vía vaginal”, dijo el especialista.

La Nación buscó los porcentajes de cesáreas en centros privados. En el Hospital Clínica Bíblica se nos dijo que, por políticas de la empresa, no se darían. Del Hospital CIMA y de la Clínica Católica no hubo respuestas, aunque se nos dijo que se gestionarían.