Mortalidad infantil bajó más del 50% en 20 años

Se redujeron de 54 a 23 defunciones por cada mil nacidos vivos en América Latina

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La mortalidad en menores de cinco años en América Latina se redujo en más de la mitad en los últimos 20 años al pasar de 54 a 23 por cada mil nacidos vivos. Sin embargo, esto no es suficiente.

Un informe de la Organización Panamericana de la Salud (OPS) indicó que la mayor parte de esas muertes se producen por desnutrición y enfermedades infecciosas que pueden prevenirse.

Por otra parte, la obesidad infantil también daña la salud y la calidad de vida de los menores.

Los promedios regionales de mortalidad infantil ocultan disparidades entre los países y hasta dentro de un mismo país.

Por ejemplo, en el 2011, Haití y Bolivia tenían respectivamente tasas de mortalidad de menores de cinco años de 87 y 51 defunciones por 1.000 nacidos vivos, en comparación con 19 en Colombia, ocho en Chile y seis en Cuba.

En Costa Rica, la cifra es de 9,07 muertos por cada 1.000 nacidos.

Por estas disparidades, la OPS propone un abordaje integral que responda a factores como salud física, salud mental y emocional, nivel socioeconómico, zona de residencia, nivel de educación y acceso a los servicios de salud.

“El objetivo general del plan es lograr que los niños sobrevivan, prosperen y tengan vidas saludables y felices”, dijo Gina Tambini, gerente del Área de Salud Familiar y Comunitaria de la OPS.

La estrategia. La OPS propone una estrategia de cinco puntos. El primero consiste en promover la ejecución de intervenciones eficaces, basadas en datos científicos, para prevenir la morbilidad y la mortalidad de los niños.

El segundo es apoyar políticas de salud integral de la niñez como parte de los planes nacionales de salud generales. El tercero es fortalecer los sistemas y los servicios de salud para apoyar la prestación de atención de calidad, incluyendo estrategias alternativas para llegar a las poblaciones menos atendidas.

El cuarto consiste en promover la coordinación entre los entes públicos y privados relacionados con la niñez para consensuar los servicios de salud integral de la niñez.

Finalmente, el quinto punto es fortalecer la capacidad del personal sanitario en los establecimientos de atención primaria en salud integral para niños.

Estas metas deben cumplirse para 2015.