San José (Redacción). Un hombre de 37 años que perdió gran parte de su rostro debido a un accidente con armas de fuego fue sometido con éxito al trasplante de rostro más completo hasta el momento.
El trasplante incluyó mandíbula superior e inferior, una porción de lengua, dientes y los tejidos blandos que van desde el nacimiento del cabello hasta el cuello, según informaron autoridades de la Universidad de Maryland hace unos minutos en una teleconferencia de prensa a la que La Nación tuvo acceso.
"Utilizamos prácticas quirúrjicas innovadoras y y técnicas de computadora para trasplantar lo más lo más precisamente la mitad de la piel del rostro, las mandíbulas, los dientes y la lengua. Además, el trasplante incluyó todos los tejidos blancos desde el nacimiento del pelo hasta el cuello. Se incluyeron los tejidos que permiten la expresión de las personas, y nervios sensitivos y motores que reestablezca la sensación y el funcionamiento normal", explicó Eduardo Rodríguez, jefe de cirugía plástica, reconstructiva y maxilofacial del Centro Médico de la Universidad de Maryland, quien lideró el procedimiento.
"Nuestra meta es devolver el funcionamiento con los mejores resultados estéticos", añadió.
El procedimiento demoró 36 horas, e incluyó la participación de más de 150 especialistas de diferentes ramas de ciencias de la salud.
"Este logro es la culminación de más de 10 años de investigar la respuesta del sistema inmunatiro a los trasplantes que continene también compuestos vasculares", comentó Sthephen Bartlett, jefe de cirugía del Hospital Universitario de Maryland.
Según comentaron los especialistas, el trasplante de rostro se realizó entre el 19 y 20 de marzo anterior, y es uno de los cuatro trasplantes que el centro médico hizo en menos de 72 horas con los tejidos de un solo donante cadavérico.
Los expertos añadieron que Richard Lee Norris, el hombre que recibió su nuevo rostro se recupera satisfactoriamente. El había perdido sus labios, nariz y teniá movimiento limitado de la boca en 1997 tras su accidente con un arma de fuego.