Dificultad para tener una erección también es asunto de la pareja

La disfunción eréctil golpea la relación íntima, por lo que la terapia debe ser para ambos

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No es solo problema del hombre. La mujer o la pareja de quien sufre disfunción eréctil también carga con una situación de la que no tiene control, pero que afecta la dinámica y el comportamiento íntimos.

“En muchas ocasiones, quien llega primero es la mujer, preocupada porque el varón la rechaza. En muchos casos, ellos no comunican lo que les está pasando y lo que hacen para no ponerse en evidencia es evitar el contacto íntimo con su pareja. Esto golpea mucho a la otra persona”, manifestó la sexóloga Luz Jaimes.

“Si, por el contrario, ambos lo saben pero no buscan ayuda, esta situación se vuelve causa de problemas en la pareja y no solo en la cama”, añadió.

En otros casos es más bien el hombre quien llega al médico, consciente de su problema, pero con miedo de contarle a su pareja lo que le ocurre.

“Es un tabú, los hombres no lo admiten. El 80% de los hombres llegan a la consulta del urólogo solos y dicen que no quieren llevar a su pareja, cuando esto es un asunto de dos”, explicó el urólogo José Ardón.

Jaimes agrega: “La mayoría de los hombres pretenden curarse solos; llegar a la casa y que el problema esté resuelto, pero esto no es así. Para tener mejores resultados, ambos deben participar en cada etapa del tratamiento”.

Los dos especialistas enfatizan en la importancia de tratar el problema a tiempo, pues mientras más tiempo se deje pasar, más grave se hará.

“No es lo mismo un problema de seis meses que uno de cinco años. Esta condición se hace crónica con el tiempo”, dijo Jaimes.

Riesgos. El riesgo de no atender el problema no solo es físico, porque hay mayores posibilidades de males cardiovasculares. Además, si no se trabaja en pareja y se atiende el problema de la mejor forma, la estabilidad de la pareja puede ponerse en jaque.

“Hay factores que generan ansiedad en la relación. Hay temor al fracaso, de no responder en forma adecuada a la pareja. También el hombre se exige resultados en cuanto a la firmeza y dureza de su erección. Esto puede también llevar problemas mayores a la pareja”, afirmó Jaimes.

Para Ardón, la ventaja es la existencia de medicamentos que solucionan el problema, pero no es lo único que debe tomarse en cuenta. “No es solo dar una pastilla, es brindar educación sexual a la pareja, modificar factores de riesgo como fumado y sedentarismo, tratar enfermedades asociadas, si es que las hay, y buscar consejo psicosexual con especialistas. En algunos casos, también se necesitará tratamiento hormonal”, precisó el urólogo Ardón.

Los especialistas coincidieron en la importancia de que la pareja hable y busque ayuda en conjunto. De esta forma, el problema se solventará con mayor agilidad y además podrían evitarse padecimientos de salud cardíaca en el futuro.